Siempre lo ha considerado su hijo predilecto, su radiante estrella.

Don King fue una presencia fija en las peleas más significativas en la carrera de Félix “Tito” Trinidad y, el próximo 8 de junio, estará presente cuando el puertorriqueño ingrese oficialmente al Salón de la Fama del Boxeo Internacional, junto con Oscar de la Hoya y Joe Calzaghe.

Por ello, el promotor de los cabellos erizados que acuñó la frase “¡Viva Puerto Rico!” para vender sus peleas conversó con Primera Hora sobre la trayectoria de Trinidad camino a la ceremonia de exaltación que será en la ciudad de Canastota, Nueva York.

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Primera Hora: ¿Asistirá a la ceremonia?

“Estaré allí. Tito fue uno de los más grandes de su generación, además de un excepcional ser humano. Siempre fue un placer trabajar con él y con su papá (Félix Trinidad Rodríguez).

PH: ¿Qué hizo Tito Trinidad que lo convirtió en una personalidad admirada por tantas personas?

“Fue el campeón de la gente, del pueblo. Siempre ha sido bendecido por la humildad. Nunca fue egoísta. De la manera como boxeaba, su pegada, es un héroe de la gente de Puerto Rico y se elevó a un nivel que muy pocos han alcanzado. Tito vino de un lugar humilde, de pocos recursos, pero eventualmente se transformó en el representante de todos los puertorriqueños. Él fue mi gran estrella y nunca lo dejará de ser”.

PH: ¿Qué pelea, a su juicio, lo llevó a convertirse en una estrella en el boxeo?

“La de Héctor Camacho (en 1994) abrió los ojos al mundo, pero diría que la de William Joppy. Fue uno de sus grandes triunfos, junto con la de Oscar de la Hoya. Tito siempre se enfrentó a lo mejor y eso lo convirtió en alguien más importante porque peleó por la gente”.

Durante su apogeo, Trinidad fue campeón mundial en las 147, 154 y 160 libras. Además, protagonizó dos memorables combates que han quedado marcados en la memoria de los aficionados.

En 1999, el boricua enfrentó a De la Hoya, que por años fue el evento boxístico de mayor ventas aparte de los pesos completos con 1.4 millones de ventas. Eventualmente, fue desplazado por el duelo entre De la Hoya y Floyd Mayweather Jr. con 2.4 millones.

“De la Hoya me estuvo llamando hasta hace poco debido a que quería la revancha. Le voy a preguntar a Tito si desea volver (al boxeo) para que puede demostrar que fue el ganador de la pelea y despeje todas las dudas de una vez”, indicó King.

En el 2001 Trinidad estuvo en medio del desastre que sacudió a la ciudad de Nueva York cuando dos aviones secuestrados por terroristas fueron estrellados contra las Torres Gemelas que eventualmente terminaron en una montaña de escombros.

Esa misma semana, el boricua tenía pautado enfrentar al estadounidense Bernard Hopkins. El evento fue aplazado dos semanas, cuando Trinidad sufrió el primer revés de su carrera.

PH: ¿Entiende que fue prudente seguir con el evento?

“Fue el primer evento deportivo después del 9/11. Ver a Trinidad darles café a los soldados y voluntarios que estaban en los trabajos de rescate... simplemente no estaba concentrado en la pelea. Su corazón estaba con los héroes y en los hospitales con los heridos. Siempre he querido ayudar (a Trinidad) para que se pueda redimir de la derrota ante Hopkins, quien tiró al suelo y pisó la bandera de Puerto Rico”.

King y Trinidad tuvieron una relación de altibajos. Libraron una batalla en corte cuando el puertorriqueño reclamó un mejor contrato. Sin embargo, eventualmente llegó a un acuerdo millonario.

Trinidad cerró su carrera en el boxeo rentado en el 2008, después de caer por decisión ante Roy Jones Jr. No obstante, King mantiene las puertas entreabiertas a un posible retorno al ring.

“Lo que Tito decida, lo respetaré”, concluyó.