El filipino Manny Pacquiao buscará demostrar que aún tiene valor en el boxeo rentado cuando se mida esta noche (domingo por la mañana en China) a Brandon Ríos en la pelea estelar de la cartelera que presenta HBO en Macao.

Pacquiao (54-5-2, 38 KO) viene de dos derrotas al hilo, una de manera controversial y otra de forma aparatosa, que pusieron en duda su continuidad en el profesionalismo.

Desde que perdió por decisión unánime contra Erik Morales el 19 de marzo de 2005, Pacquiao acumuló 15 victorias consecutivas, que incluyeron triunfos cuestionables contra el último púgil que enfrentó: el  mexicano Juan Manuel Márquez.

Dudosa derrota contra Bradley

El mimado de Filipinas recibió el beneficio de la duda por parte de los jueces en sus dos victorias sobre Márquez, pero el 9 de junio de 2012 le tocó estar en el otro lado de la moneda al perder por decisión dividida contra el estadounidense Timothy Bradley.

Muchos vieron ganar a Pacquiao, quien se vio dominante en toda la pelea, pero los jueces C.J. Ross y Duane Ford observaron otro combate y, con votación de ambos de 115-113,  le concedieron el controversial triunfo a Bradley.

“Fue una buena pelea. Hubo varios asaltos cerrados”, dijo ese día Bradley. “Tengo que ir a casa a ver el vídeo de la pelea para saber si gané. Escucho a mucha gente abucheando, pero este público está a favor de Pacquiao”.

Por su parte, Pacquiao, expresó que sintió que ganó, pero pasó la página para prepararse para otro capítulo en su saga contra el mexicano Márquez, a quien se medía por cuarta ocasión.

Márquez no dejó dudas

Las primeras tres peleas contra Márquez fueron sumamente cerradas, con un empate, y dos victorias para Pacquiao.

En la cuarta pelea, celebrada el 8 de diciembre de 2012 en Las Vegas, Pacquiao fue mucho más agresivo en los primeros asaltos. Hasta el quinto asalto, estaba al frente en las tres boletas, sin embargo, a un segundo de acabar la sexta vuelta, Márquez sorprendió a Pacquiao con una potente derecha en pleno rostro que hizo que el filipino cayera inconsciente a la lona.

“Me descuidé. Pensé que lo tenía. Estaba sobreconfiado porque pensaba que lo tenía”, expresó en ese entonces Pacquiao luego de reponerse. “Él es un boxeador listo. Hice lo mejor que pude, pero así es el boxeo”.

Ahora, casi un año después de esa dolorosa derrota contra Márquez, el filipino regresa al ensogado para enfrentarse a un peligroso Ríos, quien a su vez viene de perder su invicto en su pasado combate contra Mike Alvarado.

En cuestión de horas sabremos si Pacquiao volverá a ser el boxeador dominante que en su momento fue.