Una vieja perla de sabiduría boxística, de esas que pretende sintetizar la experiencia de muchos años en unas pocas palabras, postula que cuando se da una pelea de revancha, el ganador del primer combate gana casi siempre el segundo y, usualmente, de una forma mucho más fácil. 

Otro viejo refrán dice que segundas partes nunca fueron buenas. 

Creo que ambos aplican a la perfección al pleito de desquite de esta noche, una revancha sin mucho sentido, entre el estadounidense Floyd Mayweather, titular wélter (147 libras) y superwélter (154 libras) del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) y de la Asociación Mundial de Boxeo), respectivamente, y el argentino Marcos “Chino” Maidana.

 Creo que Mayweather (46-0, 26 KOs) dominará esta vez mucho más claramente a Maidana (35-4, 31 KOs) que en el primer encuentro, celebrado el pasado 3 de mayo, en el que el estilo atropellado y desorganizado  del pegador argentino mantuvo ajorado al estadounidense, quien finalmente resultó vencedor por decisión mayoritaria, durante buena parte del trayecto. 

Pero, para esta segunda cita, este estilo ya perdió el elemento sorpresa de la primera vez y, puede estar usted completamente seguro que está claramente descifrado por Mayweather, quien ya sabe lo que puede esperar de su rival y que hacer para contrarrestarlo. Maidana no tiene mucho margen para mejorar su desempeño del primer encuentro, contrario a Mayweather, que puede hacer mucho más ajustes para la revancha que el argentino. 

Un punto bien importante a tener en cuenta en esta pelea es la actuación del árbitro Kenny Bayless y cuantas libertades le permite a Maidana en su tren de pelea. El árbitro del primer choque, Tony Weeks, le dio bastante libertad al argentino en este sentido y este es el tipo de detalle que puede hacer una gran diferencia en el desarrollo de una pelea. Mayweather debe imponer esta vez con mayor contundencia sus ventajas en velocidad, desplazamiento, boxeo, alcance (72” vs. 69”), contragolpeo y maña. 

El desarrollo de combate debe ser similar al primero, pero creo que los momentos de brillo del argentino serán mucho menos en esta ocasión, con Mayweather logrando neutralizar de mejor manera los esfuerzos ofensivos del retador. Maidana apuesta a una ofensiva de presión continua, que no da espacio a su oponente a otra cosa que no sea defenderse, pero va frente a uno de los mejores peleadores defensivos y de mejor contragolpeo en la actualidad. No me extrañaría ver unas tarjetas mucho más abiertas a favor de Mayweather en esta ocasión.