RIO DE JANEIRO  — Neymar dijo que cobrar el último penal en la definición ante Alemania por la final de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro fue el momento más nervioso de su vida.

El astro del Barcelona metió el disparo que selló la conquista de la primera medalla olímpica de oro de Brasil. Los anfitriones se impusieron 5-4 en la definición de penales, después que el partido terminó 1-1.

Neymar regresó al estadio Maracaná de Río, el mismo escenario de aquel partido en agosto, para participar de un partido de caridad organizado por el exfutbolista Zico. Mirando al arco donde anotó el penal decisivo, el delantero recordó aquel momento.

"Estoy recordando mientras caminaba para patearlo. Jamás había estado tan nervioso en mi vida. Lo único que podía pensar era, 'por amor a Dios, ¿dónde pateo la pelota?''', dijo el goleador de 24 años el miércoles por la noche. "Entonces Dios me dio la capacidad para estar tranquilo y anotar el gol".

La medalla de oro era el único título que faltaba en las vitrinas del fútbol brasileño. Neymar también ayudó a Brasil a llegar a la final en los Juegos de 2012 en Londres, pero perdieron ante México.

El oro en Río fue un punto de inflexión para la selección, que exorcizó algunos de los demonios del humillante revés 7-1 ante Alemania en las semifinales del Mundial de 2014. Después de los olímpicos, la selección ganó seis partidos consecutivos en las eliminatorias mundialistas, todos con el nuevo técnico Tite.

Neymar anotó dos goles en el partido del miércoles, que recaudó fondos para las víctimas del accidente aéreo en el que murieron 19 jugadores del club brasileño Chapecoense.