La FIFA abrió el lunes un procedimiento disciplinario contra México, un día después de que sus seguidores gritaron nuevamente un insulto considerado homofóbico durante la victoria por 1-0 sobre Alemania. 

Algunos de los seguidores mexicanos corearon el insulto cuando el arquero alemán Manuel Neuer se alistaba a realizar un saque de meta a los 24 minutos del encuentro en el Estadio Luzhniki de Moscú. 

En México, los aficionados acostumbran proferir la palabra malsonante, dirigida al arquero rival, cada vez que realiza un saque de puerta. Aunque la palabra es considerada ampliamente como un insulto, algunos niegan que tenga una intención discriminatoria. 

La FIFA no proporcionó detalles sobre la naturaleza del proceso disciplinario ni indicó una fecha para la realización de la audiencia. 

“Se comunicarán más detalles a su debido tiempo. El proceso está abierto, por lo que se les pide por favor que entiendan que no podemos comentar más al respecto en este momento”, precisó la FIFA en un comunicado. 

El organismo rector del fútbol mundial ha multado en más de media docena de ocasiones a la Federación Mexicana de Futbol por los cánticos de sus aficionados en los últimos años. Sin embargo, se ha abstenido de imponer otro tipo de sanción. 

La Federación Mexicana y los mismos jugadores han pedido en el pasado a los aficionados que eviten el uso de ese grito en particular para evitar mayores sanciones. 

El Tribunal de Arbitraje del Deporte (TAS por sus iniciales en francés) canceló en noviembre pasado dos multas en contra de México, al decretar que el grito era “insultante” pero no tenía intención ofensiva. La corte, sin embargo, ratificó otras multas similares. 

El órgano rector del fútbol utiliza un nuevo proceso antidiscriminatorio para el Mundial, bajo el cual se les instruye a los árbitros a detener el encuentro para que se realice un anuncio en el sistema de sonido del estadio cuando se escuche u observe algún comportamiento discriminatorio. En caso de que continúe, el silbante puede suspender el encuentro, e incluso cancelarlo si la conducta persiste. 

La FIFA no respondió a una solicitud para comentar sobre por qué el árbitro no utilizó el sistema durante el encuentro del domingo.