SAINT-DENIS, Francia— Francia encontró su talismán en la Eurocopa de fútbol, y no se llama Paul Pogba.

Un fulminante zurdazo de Dimitri Payet en la agonía del partido encumbró el viernes a la anfitriona Francia a un debut triunfal en su Eurocopa, con una victoria 2-1 ante Rumania que se labró con una copiosa dosis de perseverancia al acusar el peso de responsabilidad de no decepcionar a su público.

"Teníamos tanto estrés, tanta presión", declaró Payet. "Si alguien me hubiera dicho que iba a entrar así, no le hubiera creído".

Desde el balcón del área, a los 89 minutos de un partido que se encaminaba a un empate, Payet clavó el balón en la escuadra para sentenciar el triunfo de Les Bleus.

Eclipsando a su más publicitado compañero Pogba, el volante ofensivo de West Ham culminó con un majestuoso gol la que fue la mejor actuación de la noche en el equipo de Didier Deschamps, irregular durante varios tramos del partido en el Stade de France en Saint-Denis.

"Rumania nos incomodó demasiado", reconoció Payet. "Nos tomó tiempo entrar en el juego, tal vez por toda la emoción del partido inaugural".

Instantes después, Payet fue reemplazado y recibió una ovación de pie que le dejó con los ojos llorosos por la emoción.

Enchufado y moviéndose por ambas bandas, Payet también gestó el primer tanto francés, a los 58, al servir el centro desde la derecha que Olivier Giroud cabeceó al fondo de la red.

Pero el lateral Patrice Evra desplazó a Nicolae Stanciu dentro del área chica y Bogdan Stancu logró la igualdad transitoria para Rumania al anotar de penal a los 65.

El empate daba para azuzar los cuestionamientos sobre Deschamps, pero el zapatazo de Payet reescribió a tiempo la historia del partido inaugural de la primera Eurocopa que reúne a 24 selecciones y en la que Francia ambiciona su tercer título.

Rumania y su entrenador Anghel Iordanescu sorprendieron de entrada al adelantar sus líneas, generando desconcierto en los dueños de casa. A los cinco minutos, un remate de Cristian Sapunaru tras un tiro de esquina tuvo que ser repelido en la línea por el arquero Hugo Lloris.

El equipo con la mejor defensa durante las eliminatorias —apenas encajó dos goles en 10 partidos — demostró que tenía la capacidad de hacer daño ante un rival que evidenció fragilidad en el fondo tras las bajas por lesión de Raphael Varane y Mamadou Sakho.

Francia tenía una tarea complicada, pero de a poco fue entrando en ritmo. Antoine Griezmann dispuso de la primera buena ocasión, con un remate al palo a los 14.

Pero las jugadas de peligro básicamente fueron gracias a Payet. ¿Y Pogba? Aislado en el mediocampo por marcadores rumanos que no le dieron espacios, el volante que se presentó al torneo llamado a ser la figura principal de Francia solo derramó ímpetu y escasa claridad en la generación de ataque.

El primer gol francés tuvo la colaboración de cierta displicencia de la defensa rumana y también de los árbitros, que no se percataron que Giroud, al elevarse para el cabezazo la daba un codazo al arquero Ciprian Tatarusanu.

La ventaja fue efímera. Stancu capitalizó el penal tras la imprudente falta de Evra.

En busca de soluciones, Deschamps pateó su tablero al sacar de cancha a Griezmann y Pogba, dando entrada a Kingsley Coman y Anthony Martial. Al final, Payet fue el salvador ante una Rumania que había hecho suficientes méritos para rescatar el empate.

"Es muy doloroso dejar escapar un partido de esa forma", se lamentó Iordanescu.

Ambos equipos tienen por delante partidos contra Albania y Suiza, que completan el Grupo A.

"Estos tres puntos son muy importantes y nos permitirán trabajar con calma", afirmó Payet.