LILLE, Francia  — Gales no cayó presa del pánico y su Eurocopa de ensueño añadió un nuevo capítulo: semifinalista en su primera participación.

Con una demostración de imponente tenacidad, la selección británica fulminó el viernes 3-1 a Bélgica en un vibrante partido de cuartos de final.

Y los galeses lo hicieron sin depender de su talismán Gareth Bale, dándole la vuelta al marcador tras encajar un gol a los 13 minutos, para clasificarse a su primera semifinal en un gran torneo.

Hal Robson-Kanu y Sam Vokes, dos ignotos delanteros, sentenciaron el triunfo con sus goles a los 55 y 86 minutos, respectivamente.

En la jugada de su vida, Robson-Kanu gambeteó a tres defensores —con el "giro de Cruyff"— y batió al arquero belga Thibaut Courtois.

Vokes salió de la banca y cabeceó un centro de Chris Gunter para dar rienda suelta detrás del rincón gales de un estadio de Lille que estaba atestado por hinchas belgas.

Bélgica fue como una tromba en los primeros compases y se adelantó con un remate desde 25 metros de Radja Nainggolan.

Desbordada por el empuje inicial belga, Gales logró enchufarse y niveló a los 30 minutos con un cabezazo Ashley Williams.

Gales se las verá con Portugal en una semifinal que se disputará el próximo miércoles en Lyon. Será un duelo que enfrentará a los dos grandes astros del Real Madrid: Bale contra Cristiano Ronaldo.