RÍO GRANDE. La inglesa residente en Puerto Rico y casada con un boricua, Kelley Amanda Stobie, recibirá mañana un reconocimiento especial en los premios Eclipse por su rescate y cuido de caballos abandonados en las jaulas del hipódromo Camarero tras el paso por la Isla del huracán María. 

Será un reconocimiento seguro relacionado a Puerto Rico en los premios Eclipse este jueves, día cuando el jinete José L. Ortiz es candidato para al premio Jinete de Primera y Evin Román y Héctor Díaz, hijo, lo son para Jinete Aprendiz. Los premios Eclipse son otorgados por varias asociaciones hípicas de Estados Unidos y Canadá para reconocer a sus valores del año. La ceremonia de premiación es en Miami, Florida, en el hipódromo Gulfstream Park. 

Stobie es cofundadora de la organización Caribbean Thoroughbred Aftercare Inc. que se encargó del rescate, cuido y hasta el traslado a los Estados Unidos de caballos abandonados a su suerte en las cuadras de Camarero tras el paso del huracán María.

Tuvo la ayuda de la cofundadora Shelley Blodgett, quien coordinó la ayuda desde la Florida, así como el doctor Ricardo Loinaz, Ewins Montaño y Pedro Agustín, entre otros.

Stobie contó que vio a los dos días del huracán el rastro de “desastre” que María dejó en las cuadras de Camarero. Vio caballos en jaulas “sin salida”, con escombros dentro, sin techo o alimentación. Encontró pocas personas para ayudarle porque “cada cual tenía su situación en la casa”.

Calculó que sobre 100 caballos necesitaban ayuda. Y dijo que, aunque le satisface el premio por su labor, lo recibirá con un sentido de pena porque sufrió mucho al ver tanto desamparo en los animales que ama.

“No es así que quería ganar un Eclipse”, dijo Stobie, quien reveló que sobre 60 caballos de las cuadras de Camarero han muerto por la práctica de eutanasia a raíz de la situación que dejó María en las cuadras, en donde no hubo alimentos, medicamentos o techo adecuado para los animales por las primeras semanas post huracán. Los dueños de los caballos son quienes ordenan a ejecutar la eutanasia.

Agregó que pudo rescatar a 13 caballos de las cuadras que están ahora bajo su mantengo en dos fincas gracias a las donaciones que recibe su organización, como el cargamento de alfalfa y medicamentos que recibió desde los Estados Unidos por amantes de los caballos.

Pero cree que pudo haber salvado más ejemplares si Camarero le hubiese asistido más en la transportación de caballos a sus cuadras. 

“Si hubiésemos trabajado juntos, hubiésemos obtenido resultados más rápido”, dijo.

De toda esta situación y del premio, Stobie sí se lleva varias satisfacciones. La primera es ver a los caballos salvados recuperar su condición, así como darle unos últimos días con calidad de vida a animales maltrechos que eventualmente murieron en su finca.

“Mucha gente ahora mira que nosotros hicimos mucho. Si no llega esa ayuda de afuera, se hubiesen muerto muchos más caballos”, destacó.

Stobie dijo que los caballos que salvó y rehabilitó reciben nuevas oportunidades en el deporte ecuestre o simplemente como ejemplares de recreación. 

Avisó que los interesados en ayudar su organización o en adquirir los caballos lo pueden hacer visitando la página adoptcaribbeanottb.org.