Cuando Adriana Díaz se clasificó a las Olimpiadas a principios de mes elevó su nombre dentro de la historia deportiva del país y elevó el nivel de competencia que enfrentará de ahora en adelante.

Por ende, la preparación y el entrenamiento tenían que cambiar, por lo que desde el lunes la prodigiosa tenismesista utuadeña esculpe su cuerpo con un preparador físico.

“Estamos elevando el nivel de preparación”, dijo Bladimir Díaz, padre de Adriana y entrenador del equipo nacional femenino de tenis de mesa.

“Contratamos a un preparador físico para que Adriana cubra esa área, que entiendo era su talón de Aquiles. Ella tiene buenas destrezas en las manos y mucha valentía,  pero entendía que su físico era su debilidad mayor y  ahora lo estamos corrigiendo”, explicó Díaz.

El entrenador seleccionado para la tarea de poner a la valiosa adolescente en condición óptima lo es Ayram Texidor, un joven preparador físico oriundo de San Juan. 

 Texidor ha trabajado en el pasado  con la organización de los Marineros de Seattle y recientemente trabajó preparando a atletas universitarios para el Combine de la NFL. Además  cuenta con experiencia en el Baloncesto Superior Nacional y en la Liga de Béisbol Invernal boricua.

“Estoy súper emocionado pues llevaba tiempo esperando una oportunidad así”, dijo Texidor vía telefónica. “Lo que me gusta es que ella es una niña todavía y puedo hacer un trabajo desde cero”.

“Lo de ella es un talento sobrenatural y mucha práctica, pero nunca ha tenido experiencia en la preparación física. Yo espero estar con ella mucho tiempo y, a largo plazo, ir llevándola cuando sea joven adulta, y adulta. Para mí sería un honor ayudarla en su trayectoria”, agregó Texidor.

Este indicó que, tras realizarle unas pruebas y mediciones a Adriana, comenzó este lunes a trabajar a diario en sesiones que incluyen pista, pesas, bolas medicinales, bandas elásticas y todo tipo de implemento de entrenamiento.

Por las próximas cinco semanas, el objetivo primordial será fortalecer tanto las piernas como el abdomen y los brazos de Adriana, a la vez que  se trabaja en su condición cardiovascular.

“Es algo completo. Incluye fuerza, agilidad, rapidez y resistencia”, explicó Díaz padre.

Este recordó que según vio el crecimiento y desarrollo de su hija notó sus habilidades naturales, pero igual se dio cuenta de que, al crecer,  sus piernas se alargaron, perdió algo de velocidad y  control en sus movimientos hacia los lados y hacia el frente. 

“Ahora que clasificamos vamos a jugar en el más alto nivel del mundo, y no queremos ir en desventaja. Quiero que, dentro de  su edad (15 años), vaya bien preparada. De cualquier manera, este no es su ciclo. Su ciclo era el del 2020, pero como se adelantó el proceso, hay que hacer los ajustes”, agregó Díaz, padre.

Texidor indicó que luego de las cinco semanas próximas le dejará a Adriana un programa de acondicionamiento para que ella le dé seguimiento a los trabajos, ya que se espera que esté fogueando en China antes de las Olimpiadas de Río, que se celebrarán del 5 al 21 de agosto.