Si el Maratón de Boston siempre ha sido una de las carreras más populares del mundo, la edición de este lunes será una de las más especiales.

Un año después de los atentados con explosivos que dejaron un saldo de tres muertos y cientos de heridos, esos hechos se convierten esta vez en celebración del deporte y la vida por encima de la violencia y la tragedia.

Y entre los corredores que participarán este año se encuentran cerca de una veintena de boricuas que no solo se negaron a que el miedo les impidiera competir, sino que los fatídicos hechos de 2013 los motivó a estar presentes en las actividades que se celebrarían durante todo el fin de semana.

“Uno de los motivos por los que estamos aquí es en apoyo al evento. No podemos intimidarnos ni amilanarnos en el deporte”,  le dijo a Primera Hora, vía telefónica desde Boston, Joe Laboy, presidente del club Borinquen Runners. En este grupo hay cuatro mujeres y seis hombres que correrán el lunes, pero la lista de residentes en Puerto Rico registrados en la carrera asciende a un total de 20 atletas.

“Hay pocos puertorriqueños en esta carrera, porque hay que cualificar, tener un registro de tiempo por edad, para poder correr. Creo que hay muchos que tenían los registros que decidieron venir por ese significado especial del aniversario de la explosión”, añadió Laboy, quien estará en el Maratón por tercera ocasión, aunque no participó el año pasado.

A pesar de los cambios en las medidas de seguridad, Laboy asegura  que “la gente está bien positiva, el ambiente es de alegría”.

“Hay mucha seguridad, registros, perros; pero todo el mundo lo ha tomado de buena manera”, aseguró el corredor puertorriqueño.

Según reseñó Prensa Asociada, para la edición de este año, la organización permitió que se registraran 36,000 participantes –la segunda mayor en la historia de la prueba–, luego de cinco años consecutivos limitando la matrícula a solo 27,000 personas.

“Habrá muchos corredores que no terminaron el año pasado”, dijo Laboy.

En efecto, los organizadores invitaron a los más de 5,000 corredores que aún no habían terminado el recorrido el año pasado cuando las bombas explotaron para que lo intenten nuevamente el lunes.

Además, se unirán “los policías y bomberos que atendieron la escena de las explosiones; y los doctores, enfermeras y voluntarios que extendieron su ayuda a los lastimados. Igualmente los heridos, sus amigos y familiares y todo aquel que quiere correr para honor o por la memoria de alguien”, según informó Prensa Asociada.

En comparación con sus participaciones anteriores, Laboy dice que esta vez hay mucha más gente desde el viernes participando en todas las actividades conmemorativas. Una vez más, el mensaje es que la sana recreación y el deporte son más fuertes que el miedo y la violencia.

“La tragedia fortaleció el evento, creció la participación”, concluyó Laboy.