Una envidiable carrera como profesional, que comenzó como atleta olímpico y que llegó a su fin hace un par de semanas fue celebrada hoy, domingo, en la Cena Olímpica que cada año efectúa el Comité Olímpico de Puerto Rico y que este año homenajeó al recién retirado púgil Miguel Cotto.

La gala anual del ente rector del deporte boricua, en la que además se premia a los atletas más destacados de cada una de las federaciones afiliadas, le fue dedicada al expresidente del Comité Olímpico y de la Federación de Béisbol de Puerto Rico, Osvaldo Gil, quien pese a un delicado estado de salud hizo acto de presencia y pronunció un emotivo discurso.

La presidenta del Copur, Sara Rosario, destacó que la premiación se realizó en un año y un momento sumamente difícil para los puertorriqueños en términos de los estragos esparcidos por toda la isla por el huracán María, pero que el 2017 fue un año en el que también el deporte isleño tuvo logros por doquier.

“Queríamos quitarnos el look huracanado y festejar los logros. Porque todavía el Team Rubio resuena, y Adriana Díaz se clasificó para las Olimpiadas de la Juventud. Porque tenemos 235 clasificados para Barranquilla y la esgrima está dando de qué hablar. Tommy Velázquez es presidente de la Federación Internacional de Sóftbol y María Pérez (judo), Bryan Alvarado (tiro con arco) e Israel Hernández (bolos) ganaron medallas mundiales. Le debemos más alegrías a este pueblo. Estamos vivos y listos para el gran reto del 2018”, dijo Rosario pasando lista sobre algunos de los grandes logros que ha vivido el deporte durante el año.

En la actividad, además de a Cotto, se honró al periodista y exdirector de deportes de El Nuevo Día, Raymond Pérez, con el premio Joaquín Martínez Roussett; el enebeísta José Juan Barea recibió el galardón William Miranda Marín por su espíritu de ayuda a la Isla tras el desastre; y el premio Germán Rieckehoff Sampayo, que recibió Cotto. 

En el acto también se recordaron a los amigos del deporte fallecidos durante el año, entre ellos Héctor Cardona, Tuto Marchand, Elliott Castro y Joaquín Martínez Roussett.