La relación entre el entrenador Juan “Nacho” Todero y su pupila Mónica Puig Marchán comenzó poco después del torneo Wimbledon en julio de 2015. Sin embargo, a juzgar por los recientes resultados de la tenista, parece que llevan años trabajando juntos.

Durante el pasado Abierto de Australia en enero, Puig alcanzó la tercera ronda. Y esta semana, en la Fed Cup que se celebra en Bayamón, le ha pasado el rolo en sencillos a las jugadoras de Guatemala, Uruguay y Bahamas. 

De hecho, alcanzar la tercera ronda del primer torneo ‘grand slam’ del 2016 le ayudó a ascender al puesto 47 en las clasificaciones de la Asociación Femenina de Tenis (WTA, por sus siglas en inglés).  

“Poco a poco, Mónica ha ido agarrando todo lo que hemos trabajado. Es una chica muy trabajadora que siempre nos da el 100 por ciento y eso nos hace las cosas más fáciles”, compartió Todero, quien ha trabajado en el pasado para la Asociación de Tenis de Estados Unidos (USTA, por sus siglas en inglés).

“Por suerte, hemos tenido buenos resultados y estamos contentos por eso”, agregó.

En años recientes, Puig ha pasado por las manos de múltiples entrenadores, entre ellos el español Ricardo Sánchez, quien fue su último timonel. Pero a mediados del pasado año, optó por un cambio.

“Creo que se ha convertido en una jugadora más sólida, entendiendo lo que tiene que hacer dentro y fuera de la cancha para prepararse para los partidos. Vamos buscando y llegando a los objetivos que deseamos alcanzar. Recién empezamos”, dijo Todero. 

En los tres partidos en sencillos de la Fed Cup que ha disputado, Puig no ha perdido ni un solo parcial y en dos desafíos apenas estuvo media hora en cancha.

“En términos individuales, creo que cada vez está más sólida y se están viendo en los resultados. Está ganando partidos bastante fáciles. En dobles, creo que está manejando el doble como líder y eso me gusta. Está llevado a las demás chicas, empujándolas, y están dando lo que queremos. Todas las chicas son peleadoras, trabajadoras, y es una virtud grande en el equipo”, sostuvo.

Todero reconoció que Puig todavía no ha alcanzado su techo.

“Creo que nos conocemos bastante bien. Sabe lo que pido de ella, lo que deseo, y ella lo tiene claro. El año apenas comienza, vamos paso a paso, y siempre concentrándonos en el proyecto para así dejar que las cosas vengan solas”, concluyó el coach argentino.