El club Sparta de Puerto Nuevo ha ganado fama como forjador de ciudadanos clase de primera a través de la lucha olímpica. Así hay un sinnúmero más en el mundo, como es el caso del club Long Beach Gladiators de Long Beach, Nueva York.

Los Gladiators han saltado a la luz pública en Estados Unidos recientemente gracias a la historia del niño de siete años Isaiah Bird, quien a su temprana edad ha comenzado a despuntar en el deporte a pesar de que nació sin ambas piernas.

La inspiradora historia de Bird fue reseñada esta semana por ESPN en un breve documental, en el que se muestra cómo el niño ha superado todos los obstáculos de la mano de su entrenador Miguel Rodríguez. 

De hecho, en la pieza de ESPN, se puede apreciar a Rodríguez vistiendo un abrigo en el cual se ve una bandera de Puerto Rico en el pecho. Además, la silla de rueda de Isaiah lleva una tablilla de adorno que lee el nombre del niño y “Puerto Rico” en la parte inferior.

Resulta que Rodríguez, de origen venezolano, visita frecuentemente la Isla. Los Gladiators, se podría decir, son como un “club hermano” de Sparta, pues viajan todos los años a Puerto Rico para participar de la copa internacional que celebran los boricuas.

El medallista olímpico Jaime Espinal, producto del club Sparta, dijo haber conocido a Rodríguez y compartido con el entrenador en múltiples ocasiones, tanto en la Isla como en Estados Unidos.

“Él (Rodríguez) lleva muchos años viniendo a Puerto Rico. Él está haciendo allá (en Nueva York) algo muy parecido a lo que nosotros hacemos acá con el Club Sparta. Igual que nosotros, él trabaja con muchos niños de escasos recursos y sirve como figura paternal. Él es un ejemplo de todo lo que debe ser un entrenador de lucha”, expresó Espinal a Primera Hora. 

Incluso, Espinal dijo que ha visitado en par de ocasiones la sede de los Gladiators. No obstante, no recuerda haber compartido con el pequeño Isaiah. 

Sobre Rodríguez, Espinal dijo que el amor que le tiene a Puerto Rico es tanto, que llegó a pensar que el entrenador era de origen boricua. 

“Yo pensaba que era puertorriqueño, algún lazo debe tener. Yo sé que siente mucho respeto por Puerto Rico. Incluso, nos ha donado equipo para el club. Ahora es más fácil para nosotros conseguir ayuda (por los recientes logros internacionales), pero antes de las medallas él siempre nos daba la mano. Yo pienso que él siente mucho orgullo por ser latino”, sentenció Espinal, medallista de plata en las Olimpiadas de Londres 2012.