Por casi 30 años, la frase popular de que alguien está “bregando Chicky Starr” ha sido sinónimo de traición, de hacer las cosas mal de forma premeditada, de hacer trampa  o de no cumplir tu palabra.

Y es que precisamente esas eran las características que describían a Chicky Starr como principal figura del bando rudo en la lucha libre local, particularmente durante su apogeo en la década de 1980.

Su estilo mañoso, tramposo, listo, arrogante, y   de verbo abundante y original para insultar a los luchadores técnicos generaba reacciones en la fanaticada como ningún otro rudo boricua en la historia.

Era un especialista en “tirar la piedra y esconder la mano”, lo que lo convertía, sin duda, en el más odiado de la afición.

¿Pero cómo comenzó todo?

“Para el tiempo que comencé como luchador técnico en la WWC bajo la tutela del Invader, el narrador Joaquín Padín hijo solía decir: ‘Hay que estar con Chicky Starr’. Pero una vez traicioné al Invader y lo dejé ensangrentado, se viró la tortilla. Ahí Joaquín Padín hijo expresó la famosa frase por primera vez cuando dijo que yo estaba ‘bregando Chicky Starr’. De momento mi nombre se convirtió en el equivalente al concepto de traición o a ser tramposo y trascendió más allá de la propia lucha libre”, reveló Chicky Starr durante su entrevista con Primera Hora.

“Y esa frase pegó y se quedó como parte de la cultura popular en Puerto Rico. Honestamente, nunca me hubiera imaginado que eso iba a ocurrir, que iba a trascender mi personaje y se convertiría en un estribillo que hasta se ha utilizado en los tribunales y en las agencias de gobierno del país”.

Ya más tarde en su carrera y a fines de la década de los 90, cuando se volvió popular el vitorear a los rudos  y no necesariamente respaldar a los técnicos, Chicky Starr hasta tuvo una manada de fanáticos llamada la “Legión Chickystariana” que iba a todas las carteleras a respaldarlo.

“Fue una idea que se originó de un grupo de estudiantes de la UPR-Mayagüez y se ha expandido a otras partes del mundo. Ahora mismo hasta tengo ‘legionarios’ en países como Irak, Afganistán, Brasil y Argentina”, agregó Starr.