Luego del segundo lugar obtenido en el evento DN Galan, celebrado este jueves en el Estadio Olímpico de Estocolmo (Suecia), el vallista puertorriqueño Javier Culson está obligado a ganar la última carrera de la Liga Diamante de la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF, por sus siglas en inglés), para proclamarse por tercera ocasión consecutiva como el rey de los 400 metros con vallas.

Culson fue vencido hoy, jueves, por el estadounidense Michael Tinsley en la penúltima carrera de esta serie, con tiempo de 49.60 segundos. Este resultado provocó que Tinsley se posicionara como líder de la liga con 17 puntos.

El ponceño, que cerró con 49.84, cedió el puntero con 15 tantos. En un distante tercer lugar, está el sudafricano Cornel Fredericks con cuatro.

"Javier Culson está obligado a ganar la última carrera o a llegar segundo, con Tinsley llegando tercero, para poder ganar nuevamente la Liga Diamante", señaló el veterano entrenador Carlos Guzmán.

"Si Culson gana el próximo jueves, gana la Liga con 23 puntos. Si llega segundo y Tinsley tercero, estarían empate con 19. Pero Culson vencería porque ha ganado más carreras. Así que Culson está obligado a llegar primero que Tinsley", agregó el presidente del Colegio de Entrenadores de Atletismo de Puerto Rico (Ceapur).

La séptima y última carrera de esta serie será el Weltklasse Zürich, que se celebrará el próximo jueves, 28 de agosto, en Suiza. Por ser la prueba final, los puntos para los primeros tres corredores en arribar a la meta se doblarán. Así las cosas, el que llegue primero sumará ocho puntos, el segundo lugar se llevará cuatro y el que quede tercero tendrá dos tantos.

El medallista de bronce en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 obtuvo el título de la Liga Diamante en 2012 con 16 puntos y en 2013 con 15 tantos.

Batallaron contra el mal tiempo

Durante la carrera de este jueves, todos los atletas registraron tiempos por encima de lo normal. Esto se debió a las desfavorables condiciones del tiempo que se registraron en el estadio, donde se informó la formación de remolinos de viento. "Las condiciones ambientales no fueron buenas para los corredores. Todos registraron un segundo más de lo que suelen correr. Culson y Tinsley pudieron haber hecho entre 48.6 y 48.5 segundos", teorizó Guzmán sobre la carrera, en la que el resto hicieron tiempos sobre los 50 segundos comenzando por quien llegó en tercer lugar, el trinitense Jehue Gordon (50.13).

"En ese estadio entran vientos cruzados que crean remolinos, y eso afecta a los corredores que tienen que esforzarse más", agregó el experto.

De hecho, ese esfuerzo adicional pudo haberle pasado factura al boricua, quien salvó la última valla primero que el resto de los competidores, pero fue sobrepadado por Tinsley en los últimos 25 metros. "Culson no es un corredor fuerte, así que ese esfuerzo extra le pudo haber afectado", opinó Guzmán.