El pueblo se movilizó, y pronto, una de las figuras más emblemáticas de la lucha libre podrá disfrutar de un renovado hogar y dejar atrás una de las peores pesadillas de su vida. 

Luego del incendio que prácticamente lo dejó sin hora, José Huertas González, mejor conocido como el Invader #1, comenzó a recibir la ayuda para restaurar su hogar tras ser víctima de un siniestro en su residencia en Cataño.

“Muchas personas han llegado. Hoy (el viernes) llegaron gente de Hogar Crea y voluntarios”, indicó Marcos Rivera, de la fundación “Héroes para campeones”. 

“Mañana (sábado) espero que vengan más personas”, señaló Rivera, quien estimó en 30 voluntarios los que trabajaron el viernes desde tempranas horas del día. 

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Quienes se dieron cita  comenzaron a desmantelar la casa con lo que restó del incendio. Aproximadamente, se estiman en $70,000 los daños. 

“Falta piso, pega para piso. Hay que empañetar. Es más fácil hacer una casa nueva”, expresó Rivera, quien aún así no pierde el ánimo de ayudar a Huertas González. 

“Se puede lograr. El sábado se espera que se termine de limpiar para luego comenzar con la pintura”, detalló Rivera, quien en el pasado trabajó en la remodelación de la casas del expúgil Wilfredo Benítez y del compositor Roberto Angleró. 

Al ritmo que llevan, Rivera entiende que la casa podría estar lista en dos semanas. Por otro lado, Rivera dijo que Huertas González se está quedando en la casa de un vecino en lo que le arreglan la casa. Poco a poco el veterano hombre de la lucha libre va pasando la angustia de lo ocurrido.

“Está soltándose un poco. Estaba en shock, llorando. Hay mucho sentimiento envuelto. Está contento, pero muy emocionado”, dijo Rivera, quien señaló que al lugar ha llegado gente hasta en guagua pública. 

De igual forma, ha recibido llamadas de varios puntos de la Isla, y de igual forma de gente del exterior. 

Se espera que los trabajos continúen el sábado desde las 7:00 de la mañana.