Australia tiene algo especial que le encanta a Mónica Puig Marchán.

La tenista puertorriqueña no titubea al decir que ese país es de sus lugares favoritos del mundo, pues le recuerda a la tierra donde nació. También guarda grandes memorias allí, como su subcampeonato en la categoría juvenil del Abierto Australiano en el 2011.

Ahora, Puig busca crear nuevos recuerdos. Desea retomar el sendero de la victoria en este 2014, además de avanzar lo más posible en lo que será su primera participación en el cuadro principal adulto del Australiano.

La acción del cuadro principal arranca el lunes en Melbourne.

“Australia es uno de mis torneos favoritos”, confesó Puig en comunicación escrita con Primera Hora desde Melbourne.

“Es muy parecido a Puerto Rico. La gente es alegre, muy simpática, y el clima es perfecto. Se me parece mucho a Puerto Rico. He trabajado bien fuerte para estar en los main draws de los Grand Slams. Es una meta que ya he alcanzado. ¡Ahora a ganar!”, dijo la entusiasta joven de 20 años, quien llega a Australia clasificada número 57 en el escalafón mundial de la Asociación de Tenis de Mujeres (WTA, por sus siglas en inglés).

El sorteo, de primera instancia, parece asequible para Puig. En la primera ronda, la puertorriqueña se medirá con una tenista que entre al cuadro principal a través de las clasificatorias, por lo que enfrentará a alguien de menor ranking.

No obstante, la rival que tendrá de frente sí llevará varios días en cancha, pues habrá superado las tres rondas clasificatorias. Un total de 12 tenistas lograrán un espacio en el cuadro principal a través del torneo previo.

Entre las jugadoras que ayer se mantenían con vida en la última ronda clasificatoria, se destaca la estadounidense Irina Falconi (141 en la WTA), quien derrotó a Puig en la final de los Juegos Panamericanos de Guadalajara 2011.

De vencer en la primera ronda, Puig se medirá en la segunda ronda con la ganadora entre la italiana Flavia Pennetta y la rumana Alexandra Cadantu.

Puig, la primera raqueta de Latinoamérica en el ranking mundial, llegó a inicios de semana a Melbourne. Comenzó el año con dos derrotas consecutivas contra Kirsten Flipkens en Auckland y Elena Vesnina en Hobart.

Pero esos resultados no amilanan el entusiasmo de Puig de cara al Australiano.

“Es el principio del año y esos partidos son, prácticamente, de entrenamiento. Lo más importante ahora es entrar en el plan de juego luego de haber pasado por casi dos meses sin jugar partidos”, sostuvo Puig.

En Australia, a Puig le llegan los recuerdos de su final en la categoría juvenil del 2011, la cual perdió en dos sets contra la belga An-Sophie Mestach. Dicho partido se disputó en la instalación principal del torneo, el Rod Laver Arena.

“Es un estadio espectacular. Fue un tremenda experiencia y espero volver a jugar ahí algún día”, recordó.

Continúan sus ajustes

Con mayores expectativas sobre sus hombros, Puig realizó varios cambios para esta temporada. Uno de ellos fue la contratación del belga William Froidville como su entrenador principal. Su coach desde los inicios de su carrera, el también belga Alain de Vos, se mantiene en el staff.

Por tal razón, el primer Grand Slam del año también forma parte de ese proceso de ajustes por el cual atraviesa la boricua.

“William es una persona estupenda. Sabe mucho de tenis y me ha ayudado mucho en mi técnica y en mi físico. Estoy contenta de tenerlo en mi equipo como entrenador”, compartió Puig, quien está clara en que su mejoría no llegará de un día para otro.

“Tengo que tener paciencia. Todo lo que él cambie o implemente en mi juego se dará a su debido tiempo. Ahora, lo más importante es enfocarme en mi trabajo. El resultado vendrá a su debido tiempo, y de eso estoy más que segura”, sentenció.