La boricua Mónica Puig cayó hoy en la “revancha olímpica” ante la alemana Angelique Kerber, en el Abierto de Dubái.

Kerber se impuso con marcadores 6-2, 6-3.

Ambas chocaban por primera vez desde que la boricua la había vencido en la final de sencillos en los Juegos de Río de Janeiro 2016, en verano pasado, para ganar la primera medalla olímpica de oro de Puerto Rico.

Después de aquella final, Puig confrontó algunas dificultades que se extendieron al inicio de la actual temporada, hasta que la semana pasada registrara una mejoría significativa llegando hasta la semifinal del Abierto de Catar.

Posteriormente se ubicó entre las mejores 16 del Abierto de Dubai, donde chocó en la tercera ronda con Kerber, quien llegó al torneo sembrada número uno y ranqueada en el mundo como dos.

Ahora la ganadora se enfrentará a la croata Ana Konjuh, quien ocupa la posición #36 en el ránking mundial de la Asociación de Tenis Femenino (WTA, por sus siglas en inglés).

“Es difícil jugar con Mónica. Estoy feliz de pasar de ronda. Fue un partido difícil. Estoy feliz con mi desempeño”, dijo Kerber a los medios tras el partido, recordando la derrota en la final olímpica de Río 2016 y resaltando que Mónica jugó excelente y mereció la victoria en aquel momento.