Rafael Nadal menciona el dato por propia iniciativa: acaba de clasificarse a los cuartos de final del Abierto de Estados Unidos y ello significa que por primera vez desde 2011 ha logrado acceder a esa instancia en todos los torneos de Grand Slam en una sola temporada. 

Se trata de una prueba de regularidad para el número uno del mundo y campeón de 17 grandes. 

 “Es un buen dato, es positivo y quiere decir que uno está competitivo en todas las superficies y en prácticamente en todas las semanas que he competido. Feliz por ello”. 

El español también sale feliz de su tarea del domingo, en la que se exigió 3 horas y 19 minutos para doblegar 6-3, 6-3, 6-7 (6), 6-4 al georgiano Nikoloz Basilashvili. 

Se instaló por octava en la ronda de cuartos en el US Open. Y para sortear esa instancia, no deberá enfrentar de nuevo al tenista que disputó con él la final del año pasado. Nadal chocará a continuación con el austriaco Dominic Thiem, el 9no preclasificado que dio cuenta de Kevin Anderson, subcampeón del año anterior, por 7-5, 6-2, 7-6 (2). 

Por la noche, el argentino Juan Martín del Potro (3er cabeza de serie) prolongó su plácida marcha en el torneo al despachar 6-4, 6-3, 6-1 al croata, clasificándose a cuartos por tercer año seguido y sexta en total. 

El campeón de la edición de 2009 ha ganado todos los 12 sets que ha disputado en Flushing Meadows hasta ahora. 

Frente a Coric (20mo preclasificado), Del Potro estuvo intratable con su potente derecha, consiguiendo con 18 de sus 33 winners con el disparo que su sello de presentación. 

Su próximo oponente será el estadounidense John Isner (11mo preclasificado), quien derrotó 3-6, 6-3, 6-4, 3-6, 6-2 al canadiense Milos Raonic. Del Potro domina 7-4 en el historial. 

Nadal y Thiem se medirán por primera vez en cancha dura dentro de una rivalidad que se ha concentrado exclusivamente en arcilla y que el español domina 7-3, incluyendo el triunfo en junio que le dio su 11mo título en Roland Garros. 

Pero Thiem presume de al menos una victoria en cada una de las últimas tres temporadas. 

“El que tenga la intensidad más alta, el nivel de adrenalina más alto el martes y el que aguante los momentos más difíciles es el que probablemente tendrá más opciones de ganar”, avisó Nadal. 

Nadal quedó con foja de 8-2 en duelos de octavos en Nueva York. Se recuperó tras perder un desempate del tercer parcial, y le quebró a su rival el saque dos veces en el cuarto. 

Tampoco mostró señales de molestias con su rodilla derecha, la que se vendó en su triunfo 5-7, 7-5, 7-6 (7), 7-6 (3) ante el ruso Karen Khachanov en la ronda previa tras 4 horas y 23 minutos. 

“Ha sido un partido largo, pero no ha llegado ser ni tan demandante físicamente ni mentalmente como el del otro día”, resaltó Nadal. “No hemos llegados a situaciones límite en lo físico como se llegaron el otro día en un momento dado”. 

Sobre la rodilla, Nadal afirmó que siempre está en alerta con una articulación que le ha causado problemas en el pasado. 

“Lo de mi rodilla derecha no es algo para olvidar, tengo como siempre es alerta en ese lugar”, dijo. “No es momento para estar hablando de la rodilla. Es momento de estar hablando de lo que viene que es lo que realmente me preocupa. La rodilla me preocupa relativamente poco en este momento y esperar que pueda aguantar hasta que los rivales me digan basta y en eso estoy”. 

Anderson esperaba verse de nuevo las caras con Nadal, quien lo venció el año pasado en la primera final del sudafricano en un Slam. La llegada de Anderson a la final del año pasado fue una sorpresa, como 32do del ranking. Fue el finalista del US Open con el puesto más bajo del escalafón en la historia de los rankings de la ATP. 

Sin embargo, respaldó su logro con una buena temporada, en la que alcanzó la final de Wimbledon y subió al quinto puesto de la preclasificación para el torneo estadounidense. 

Había ganado seis de siete encuentros contra Thiem. Las seis victorias se habían dado en cancha dura. 

El único triunfo del austriaco había sido en arcilla, superficie en la que tiene mejor desempeño. Pero el sudafricano no pudo reaccionar en el partido contra Thiem, quien avanzó a cuartos por primera vez en un US Open. 

“Es un sueño hecho realidad”, expresó el austriaco. 

Estuvo a punto de llegar a estas instancias el año pasado, pero fue superado por del Potro en octavos, durante un partido en que tuvo ventaja de dos parciales. 

En el cuadro de mujeres, la estadounidense Serena Williams avanzó a cuartos con una victoria 6-0, 4-6, 6-3 ante la estonia Kaia Kanepi. 

Serena venía de despachar a su hermana Venus el viernes y la 17ma cabeza de serie consideró que ese triunfo representó su mejor partido desde su regreso a las canchas. 

El domingo, apenas empleó 18 minutos para liquidar el primer set. Reaccionó de inmediato tras ceder el segundo parcial, distanciándose 3-0 en el último. 

La seis veces campeona del US Open, que se perdió la pasada edición al dar a luz a una niña, enfrentará ahora a la checa Karolina Pliskova (8va preclasificada).