Hay un nuevo panorama en el deporte olímpico antillano.

Hasta el pasado sábado 9 de julio, las Antillas Holandesas contaban con su propio Comité Olímpico Nacional (CON) en calidad de territorio de los Países Bajos (Holanda), muy similar a la situación de Puerto Rico como territorio de los Estados Unidos.

Sin embargo, en la 123ra Asamblea General del Comité Olímpico Internacional (COI) que se celebró la semana pasada en Durban, Sudáfrica, se decidió retirarles la franquicia olímpica a las Antillas Holandesas debido a que, desde el 10 de octubre de 2010, cambió su composición política y pasaron a ser parte integral de los Países Bajos.

De este modo, la Asamblea General ratificó lo que el Comité Ejecutivo del COI había propuesto desde la disolución de las Antillas Holandesas como país, y amparada en lo contenido en la Carta Olímpica.

El reglamento del COI establece que para tener un Comité Olímpico Nacional, el requisito principal es ser un país independiente, reconocido por la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

“Se decide retirar el reconocimiento del COI al Comité Olímpico Nacional de las Antillas Holandesas y aprueba una serie de medidas incluidas, esencialmente dirigidas a preservar en lo posible los intereses de los atletas, en particular en relación a los Juegos Olímpicos Londres 2012”, señala el acuerdo.

Ante la disolución de las Antillas Holandesas, los atletas que ya clasificaron para los próximos Juegos Panamericanos -que se celebrarán en octubre próximo en Guadalajara, México- podrán participar bajo la bandera de la Organización Deportiva Panamericana (Odepa).

Según David Bernier, presidente del Comité Olímpico de Puerto Rico (Copur), tanto el Comité de las Antillas Holandesas a través de su presidente, William Millerson, como la Odecabe dieron la batalla para la permanencia del archipiélago dentro del COI.

“Se llevaron planteamientos, se promovió la permanencia del Comité Olímpico de las Antillas Holandesas”, dijo Bernier en entrevista telefónica con Primera Hora, y también indicó que el debate interno entre las distintas islas afectó la intención de que no se retirara el reconocimiento del COI.

Repercusión en Puerto Rico

La decisión del COI sobre las Antillas Holandesas podría sentar un precedente en el caso de que Puerto Rico cambie su status político, particularmente si se convierte en el estado 51 de los Estados Unidos, y abre nuevamente el debate de la permanencia de la Isla como miembro del COI.

Por un lado, hay quienes sostienen que si Puerto Rico se convirtiera en estado de la nación estadounidense, caería bajo la Federal Amateur Sports Act, la ley que establece el monopolio del Comité Olímpico de Estados Unidos sobre la representación deportiva de todo el país.

“No creo que Puerto Rico pueda convertirse en estado y conservar su Comité Olímpico. Tendría que ser una prima donna en el mundo, porque nadie tiene eso. Lo contrario sería pensar que van a hacer una regla especial para nosotros, y la experiencia es que esa regla nunca la han hecho para nadie”, dijo, en una entrevista reciente con Primera Hora, Osvaldo Gil, quien presidió por más de 30 años la Federación de Béisbol local y fue vicepresidente del Copur por 17 años.

De otro lado, el secretario del Departamento de Recreación y Deportes, Henry Neumann, se mostró sorprendido con la noticia del retiro del aval olímpico a Antillas Holandesas, pues cree que la decisión del COI “va directamente en contra de decisiones del pasado”, en referencia al caso de Hong Kong, país que pasó a ser parte de China en 1997 y mantuvo su representación olímpica, aunque reconoce que habría que estudiar las diferencias de las relaciones políticas de Hong Kong respecto a China y los casos de las Antillas Holandesas y Puerto Rico.

“El CON y la representación internacional es una franquicia que, una vez se otorgaba, no se quitaba. En eso nos amparábamos para defender la representación de Puerto Rico en caso de ser el estado 51”, añadió Neumann.

A diferencia de Osvaldo Gil, el presidente del DRD entiende que, de ser el estado 51 de EE.UU., “se puede dar la batalla para que Puerto Rico mantenga su representación deportiva internacional... como un caso especial”.

Neumann también entiende que la tradición deportiva boricua es mucho más amplia y fuerte que la de Antillas Holandesas, y eso tendría un gran peso al momento de defender la franquicia olímpica, “por la tradición, el respeto y el performance. Ese historial no lo tiene Antillas Holandesas”.

Por su parte, Bernier indicó que el Copur sigue trabajando con los atletas puertorriqueños de cara a los próximos compromisos deportivos y que el caso de las Antillas Holandesas no tendrá ninguna repercusión en Puerto Rico.

“No tiene ningún efecto inmediato. Los parámetros de afiliación vigentes en la Carta Olímpica son los mismos desde la última enmienda en los 90. Hemos sido consistentes en atender nuestro trabajo deportivo bajo el escenario vigente sin entrar institucionalmente en consideraciones de supuestos”, concluyó el presidente del Copur.