Los Patriots de Nueva Inglaterra son el perfecto ejemplo de los millonarios que se vuelven ‘billonarios’.

No solo son los campeones defensores por segunda ocasión en los pasados tres años y vienen de ser el único equipo entre los mejores tres de la NFL en ofensiva (27.6 puntos – tercero) y en defensa (15.6 – primero), sino que la plantilla que se fue 14-2 la pasada campaña luce aún mejor para el torneo que inició anoche tras una temporada muerta bastante activa.

Bill Belichik salió al mercado y le consiguió dos juguetes más al quarterback Tom Brady al adquirir al receiver Brandin Cooks desde Nueva Orlenas y al tight end Dwayne Allen (los Patriots gustan usar rotaciones de dos tight ends junto a Rob Gronkowski y/o Martellus Bennett).

Lo que hay que ver es qué sucederá en la posición de running back, donde Mike Gillislie ocupará el puesto de LeGarrette Blount, quien marcó 18 touchdowns el año pasado por los Patriots. Gillislie anotó ocho touchdowns en acción limitada con los Bills de Buffalo el año pasado.

Así las cosas, ¿están los Patriots destinados a repetir? ¿O hay algún equipo capaz de destronarlos?

En el resto de estas páginas analizamos a los principales contendores a esa hazaña.

Giants de Nueva York

Los Giants se quedaron cortos el año pasado (11-5) al ser la sombra de Dallas (13-3) en su división, pero con los Cowboys sin Ezekiel Elliot para iniciar la temporada y problemas en su defensa secundaria, Nueva York debe tomar la ventaja y retenerla.

Los Giants tuvieron la segunda mejor defensa en la NFL en el 2016 (17.8 puntos permitidos) con un pass rush y una defensa secundaria elite. Es cuestión que el quarterback Eli Manning y el nuevo running back Paul Perkins demuestren un desempeño consistente para que los Giants sean un contendiente real al campeonato. Manning va a tener más arsenal aéreo a su disposición con Brandon Marshall sumado a la dupla de Odell Beckham y Sterling Shepard. Más aún, los Giants son el único equipo en derrotar a los Patriots de Tom Brady –y en dos ocasiones (2008 y 2012)– en las seis visitas que Nueva Inglaterra ha ido al Super Bowl desde el 2004.

Falcons de Atlanta 

El año pasado la ofensiva de los Falcons fue un torbellino, produciendo 33.8 puntos por juego y siendo el único equipo entre los mejores cinco en yardas por aire (295.3 – tercero) y en yardas por tierra (120.5 – quinto) gracias al juego del MVP Matt Ryan, a la gran protección en la línea ofensiva y a su abundancia de armas disponibles.

Pero en defensa, los Falcons solían ser de los peores en la liga –algo que se notó durante el desastroso colapso en el Super Bowl ante los Patriots. Ahora, entrando al tercer año del dirigente Dan Quinn –creador de la defensa de Seattle–, Atlanta va en pos de emular a ese equipo con una defensa veloz entre linebackers, un grupo de secundaria elite y un excelente pass rush. El año pasado dieron destellos de mejoría con el edge rusher Vic Beasley liderando la liga en sacks (15.5) y un buen desempeño del defensive tackle Grady Jarrett y los linebackers novatos Deion Jones y DeVondre Campbell. 

Ahora llega el defensive end Jack Crawford y el nose tackle Dontari Poe vía agencia libre para generar más presión interior y en el sorteo escogieron a uno de los mejores edge rushers en Takkarist McKinley y a un linebacker pegador en Duke Riley, que harán que la defensa de Atlanta suba a ser de las mejores 10 en la liga para complementar bien el ataque ofensivo.

Cardinals de Arizona 

¿En serio los Cardinals? ¿Un equipo que se fue 7-8-1 la pasada temporada? Pues sí. Cuando usted tiene una defensa como la de Arizona, siempre hay chance.

Los Cardinals tienen una de las mejores defensas frente al ataque aéreo (solo 210.3 yardas permitidas por juego), lideraron la liga en sacks (48) y fumbles (25) y cuentan con un formidable personal para el pass rush, incluyendo a los defensive ends Chandler Jones (hermano del peleador de UFC, Jon Jones) y Calais Campbell y al safety Tyrann Matthieu.

Si a eso le sumamos al mejor running back de la NFL en David Johnson, quien lideró la liga en touchdowns anotados con 20, y al quarterback Carson Palmer con armas como Larry Fitzgerald y John Brown, no es difícil pensar que Arizona deba estar cerca de 11 victorias este año. 

Steelers de Pittsburgh 

Similar a Atlanta, los Steelers tienen un arsenal ofensivo envidiable que ahora se pondrá mejor pues al receiver Antonio Brown tendrá más ayuda ahora con el reintegración de Martavious Bryant y el running back Le’Veon Bell. Pittsburgh figuró quinto en yardas por aire (262.6) el año pasado y produjo 24.9 puntos por juego.

Su defensa colectiva sigue siendo bastante sólida y acaban de firmar al veterano cornerback Joe Haden para fortalecer su secundaria.

En la Conferencia AFC, los Steelers deben ser la más dura competencia para los Patriots.