El campeón peso mediano de UFC Chris Weidman puede ser la versión de Rodney Dangerfield en las artes marciales mixtas: No lo respetan.

A pesar de haber noqueado al imbatible Anderson “Spider” Silva en verano del año pasado para arrebatarle el título de las 185 y luego defenderlo ante él otra vez en diciembre en un combate que terminó con Silva teniendo una pierna rota, Weidman todavía no es considerado un peleador elite y se pone en duda su capacidad de reinar en una división tan competitiva como el peso mediano.

No obstante, el sábado en la noche tendrá su oportunidad dorada de silenciar a sus críticos cuando enfrente a uno de los peleadores más incómodos y de mejor pegada en UFC al defender su corona ante el ex campeón semipesado Lyoto “The Dragon” Machida en el combate estelar del evento pague-por-ver UFC175 en Las Vegas.

“La primera vez que noqueé a Anderson dijeron que fue pura suerte, que él tenía las manos abajo y por ponerse payasear lo pude finalizar. Luego en la segunda pelea no conseguí el final que yo quería. Fue terrible”, relató Weidman, quien le rompió el hueso de la tibia de la pierna izquierda a Silva en el segundo pleito cuando bloqueó una patada con su rodilla en el segundo asalto “Quería noquearlo o rendirlo. No estaba feliz al final. Defendí el titulo esa noche pero no se sentía bien.  Con Machida ojalá no se le rompa un hueso y pueda ganarle limpiamente”.

Según Weidman, cuya esposa es de ascendencia boricua, viene bien preparado para Machida, a quien compara favorablemente con Silva pero con un poco de mejor pelea de piso.

“Lyoto es un pegador peligroso que se mueve bien. Anderson tenía eso también. Pero Lyoto tiene un poco mejor de lucha y es físicamente mucho más fuerte”, reconoció Weidman en entrevista con la prensa posterior a sus trabajo abierto al público el pasado miércoles.

“Para prepararme para él llevo entrenando con Stephen “Wonderboy” Thompson (20-0 en kickboxing, 9-1 en MMA n MMA), quien imitaba bastante bien el estilo de Lyoto. Ya yo lo había traído a mi campamento para mi primera pelea con Silva. Pero al principio fue bien frustrante. Soy de los peleadores que trato de cansar a mis oponentes, pero él no se cansa y es bien elusivo.  Me sentí lento al principio hasta que pude descifrar. Eso me ayudó mucho”.

Frente al zurdo karateca brasileño Machida (21-4), Weidman anticipa una pelea incómoda y dijo estar preparado para resistir su pegada si llegan a conectarle con un buen golpe.

“Siempre que entras al Octágono tienes que estar preparado para aguantar un golpe fuerte y estoy preparado para lo que venga. Yo entreno para el peor escenario. No lo estoy subestimado”, dijo Weidman, quien también reconoce la capacidad elusiva de Machida de evitar derribes y de rehuirle al combate al ras de la lona, que es la especialidad del estadounidense.

“Anticipo que evitará cada derribe que intente. Cada pelea es diferente. No va salir todo perfecto como contra Silva. Eso sería espectacular. Solo sé que lo voy a finalizar”, puntualizó Weidman, quien ha puesto fin a ocho de sus 11 víctimas, cinco de ellas por nocaut y tres por rendición.