El peleador de ascendencia boricua Eddie Álvarez venía con todas las malas intenciones de noquear al enrachado Donald “Cowboy” Cerrone durante su debut el sábado en UFC, pero la ventaja en alcance de su rival probó ser demasiado para el nativo de Filadelfia de padre puertorriqueño, quien cayó por decisión unánime con tres tarjetas de 29-28 en el evento coestelar de UFC178 desde el MGM Grande en Las Vegas.

Álvarez, dos veces campeón de la compañía Bellator y quien por fin firmó con UFC en agosto, entró al Octágono decidido a buscar finalizar su combate temprano, amarrando la cabeza de Cerrone con la mano izquierda y conectándole cerca de cinco ganchos y uppers al rostro del vaquero para tambalearlo y llevarlo de espaldas a la jaula. Pero Cerrone aguantó el embate de Álvarez, no sin antes recibir un par de rectos de derecha al rostro que le hicieron sangrar por la nariz justo antes de terminar el primer asalto.

Sin embargo, la pelea cambió a favor de Cerrone a partir del segundo episodio al lograr utilizar la distancia para atacar con frecuencia las piernas de Álvarez con fuertes patadas a los muslos y pantorrillas. Esto debilitó un poco a Álvarez, que se destaca por su buen boxeo y desplazamientos. Cerrone también fue efectivo evitando los intentos de derribos de Álvarez para mantener la pelea de pie mientras usaba sus rodillas para atacar el cuerpo del peleador de sangre boricua cada vez que se agachaba a tratar de coger sus piernas.

En el tercer episodio y con la pelea empate a un asalto por bando, Álvarez comenzó un poco más activo, conectando buenos golpes al rostro de Cerrone, pero Cerrone volvió a sus fueros con su ataque inmisericorde a las piernas de Álvarez llegando eventualmente a tambalearlo con una de sus potentes patadas. A pesar de esto Álvarez nunca se quitó y se mantuvo intercambiando golpes con su rival, pero faltando poco menos de dos minutos  Cerrone conectó una patada al muslo izquierdo de Álvarez que lo dejó sin piernas, llevándolo al piso.

Cerrone trató de finalizar la pelea abajo con ‘ground and pound’. No obstante, Álvarez se amarró bien, evitando daño y llevando la pelea a la decisión de los jueces.

Con su triunfo, Cerrone (25-6) aumenta su ristra de triunfos a cinco al hilo, mientras que Álvarez (25-4) ve finalizar su racha de tres victorias consecutivas. 

“Este tipo de verdad que no se quita. Traté de finalizarlo a lo último, pero estaba muerto de cansancio. Peleé con un Eddie que vino en su mejor condición y se paró a intercambiar conmigo”, dijo Cerrone durante su entrevista post-pelea.

Retiene Johnson y noquean McGregor, Romero, Zingano y Cruz

En el evento estelar de la noche, Demetrious “Mighty Mouse” Johnson (21-2-1) venció a Chris Cariaso (17-6) por rendición con una llave de brazo ‘kimura’ en el segundo asalto en una reyerta que dominó de principio a fin para defender con éxito su correa de las 125 libras de UFC.

Pero en la pelea que todos esperaban, el parlanchín irlanbdés Connor McGregor supo respaldar su exceso de verborrea con sus puños al noquear a Dustin Porier en el primer asalto con una recta a la oreja derecha, seguido de ‘ground and pound’ para colocarse a las puertas de una oportunidad titular en las 145 libras

“Muchos pesos plumas creen que han aguantado a pegadores, pero eso es hasta que pelean contra mí. Conmigo es otro cantar. En el MMA veo muchos que pelean demasiado parados, estilo Muay Thai y vine a enseñarle al público norteamericano el nuevo estilo de pelea irlandés”, vociferó McGregor, que mejora a 16-2.

Por su parte, el cubano medallista olímpico en lucha, Yoel Romero consiguió su octavo nocaut al pulverizar al Army ranger Tim Kennedy en batalla de colosos en las 185 libras durante un combate que no estuvo exento de controversia.

Resulta que Romero (9-1 con 8 KO) había dominado el primer asalto con buena recta de izquierda, usando su boxeo y explosividad mientras frustraba a Kennedy, que gusta de llevar a sus rivales al piso y abacorarlos. Pero en el segundo asalto, Kennedy aprovechó  el cansancio de Romero para ponerle presión y conectarle varios puños al rostro que tambalearon peligrosamente al cubano hasta que la campana lo salvó.

Antes de comenzar el tercer asalto, Romero se quedó sentado en su silla sin salir a pelea, lo que forzó al árbitro ‘Big” John McCarthy a sacar del Octágono a la esquina de Romero. Estos segundos extra sirvieron para darle un mayor respiro a Romero, que no se veía noqueado, sino sin aire. Al empezar el decisivo tercer asalto, Romero conectó a Kennedy con tremendo puño al rostro que llevó al estadounidense al suelo y allí lo finalizó con ‘ground and pound’. Kennedy protestó y no le dio la mano a Romero luego del pleito.

En la pelea de apertura del evento de pague-por-ver, la primer contendiente Cat Zingano mantuvo su invicto (9-0) al noquear en el tercer asalto con lluvia de codazos a la brasileña Amanda Nunes (9-4) para colocarse en posición de retar a la campeona Ronda Rousey próximamente. Zingano perdió el primer asalto, pero en el segundo dominó con su lucha y en el tercero derribó a Nunes con espectacular suplex para entonces terminar la pelea en el piso. Zingano se mostró muy emocional tras la victoria pues venía de un año y medio de inacción tras sufrir una lesión de rodilla y  el fallecimiento de su esposo.

Como si fuera poco, la velada de PPV tuvo de antesala en las preliminares el esperado regreso del ex campeón de 135 libras, Dominick Cruz (20-1), quien estuvo tres años fuera de acción debido a dos operaciones de rodilla. Cruz lució como si nunca se hubiera ido al noquear al japonés Takeya Mizugaki en el primer asalto, tras conseguir un sensacional derribe y forzar la detención del combate con ‘ground and pound’. Así las cosas, Cruz se coloca de inmediato en posición de retar al monarca TJ Dillashaw en un futuro cercano .