Por casi una década, Holly Holm fue reina del boxeo femenino en las 140, 147 y 154 libras.

Pero esta noche tratará de dar su primer paso para duplicar ese éxito al máximo nivel de las artes marciales mixtas cuando debute en UFC cuando se mida a la veterana Raquel Pennington en el pleito semiestelar de la cartelera de pague-por-ver UFC184 desde Los Ángeles, y donde podrá irse alineando para retar en un futuro cercano a la ganadora del combate principal de la velada entre la campeona de las 135 libras, Ronda Rousey, y su primera retadora, Cat Zingano.

Sin duda, Holm definitivamente tiene el potencial de lograr tal hazaña: ser la primera fémina en ser campeona mundial de boxeo y de UFC.

Estamos hablando de una boxeadora elite que obtuvo 18 campeonatos mundiales de diferentes organizaciones y, al menos, uno en cada una de esas divisiones, incluyendo siete correas unificadas en las 147 libras. ¡Y defendía todas las fajas de las tres divisiones a la vez!

Holm (33-2 como boxeadora) fue una ‘fuera de seri’ sobre el ensogado gracias a su dedicación, estatura, alcance y habilidad atlética natural. De hecho, antes del boxeo tuvo experiencia previa en otros deportes desde su adolescencia tales como gimnasia, natación, clavados, fútbol y hasta maestra de aeróbicos.

Por a pesar de que fue la Boxeadora Femenina del Año de Ring Magazine en el 2005 y 2006 y que tuvo distinciones similares de otras entidades hasta su retiro del boxeo en el 2013, incluyendo ser exaltada al Salón de la Fama del Boxeo de su estado natal de Nuevo México y ser reconocida como una de las mejores peleadoras de boxeo femenino en la historia, la realidad es que ya no tenía mucho más que lograr en ese deporte y lo que había obtenido lo había hecho sin mucha fanfarria del público en general.

Ahí fue que decidió incorporarse al emergente deporte del MMA, donde sus habilidades boxísticas podrían ser de utilidad con buen entrenamiento complementario en lucha, jiujitsu y kickboxing, siendo esto último algo que ya venía practicando desde el 2001 mientras era boxeadora profesional.

Y para ello entrenó en uno de los mejores tres gimnasios de MMA en el mundo, que es el de Jackson-Wincklejohn MMA en su ciudad natal de Albuquerque, Nuevo México y donde desde el 2011 ha ido puliendo sus destrezas en general mientras amasaba marca de 7-0 con seis nocauts en este deporte a través compañías regionales hasta que UFC vino a tocar su puerta en el 2014 para agregarla a la lista de potenciales retadoras a la hegemonía que ha tenido Rousey.

Sin embargo, su rival Pennington (5-4) no es ninguna cáscara de coco. La semifinalista del programa Ultimate Fighter 18 viene de derrotar por estrangulación a Ashley Evans-Smith al dormirla al final del primer asalto.

“Estoy nerviosa para esta pelea. Estoy bien emocionada.  La atención de la prensa es mucho más grande para el MMA femenino que para el boxeo femenino He estado en peleas grandes muchas anteriormente y siempre he estado nerviosa antes de mis peleas. Si es alguien notorio, no quieres perder ante esa persona. Y si es alguien a quien se supone que tú le ganes, pues hay más presión porque no quieres decepcionar a nadie. Es difícil como quiera”, admitió Holm en entrevista con el portal MMAFighting.com esta semana.

“En el caso particular de esta pelea, hay un peso extra sobre mí. Es mi primera pelea en UFC y quiero sacarla ya del medio. Pennington tiene un arsenal de destrezas balanceado y pelea bastante cómodo en el piso. Definitivamente no estoy mirando más allá de ella.  No creo que ella se intimide en pelear arriba tampoco. La estoy tomando muy en serio”.

Holm nunca ha estado en problemas serios en sus primeras siete peleas y Pennington tratará de arrinconarla y llevarla al piso. Pero si Holm logra mantener la pelea de pie, puede ser una corta noche para Pennington, como lo ha sido para seis de sus siete víctimas.