Tan reciente como en el 2015, el peleador de sangre boricua, Anthony ‘Showtime’ Pettis, era el rey de las 155 libras.

Sus potentes patadas  y su sólido jiu-jitsu le había creado cierta aura de invencibilidad.

Sin embargo, una  derrota titular ante Rafael dos Anjos en marzo de ese año, descarriló su carrera a un nivel que aún no ha podido recuperarse al perder cuatro de sus últimas cinco salidas, aunque ante rivales elite.

Posterior al revés con dos Anjos, Pettis perdió por decisión con el también excampeón ligero de sangre boricua Eddie Álvarez y con el brasileño Edson Barboza (tercer clasificado), lo que lo forzó a aventurarse a las 145 libras.

En esta categoría derrotó al experto en jiuj-jitsu Charles Oliveira, pero luego fue noqueado por primera vez en su carrera cuando disputó el título interino en diciembre pasado ante el actual monarca Max Holloway en una pelea en la que tuvo problemas serios para hacer el peso, lo que se reflejó  en la jaula.

Ahora Pettis busca regresar con éxito a las 155 y reencontrar la ruta de la victoria, pero le espera el veterano Jim Miller para rivalizar en el pleito que abrirá la porción de PPV del cartel de UFC213 esta noche en el T-Mobile Arena de Las Vegas.

“Esta es mi primera pelea de regreso a las 155 libras y tengo que dejarme sentir. Tengo que hacer que la gente me quiera ver pelear otra vez”, dijo Pettis, quien tendrá un hueso duro de roer en Miller.

“Todas las peleas de Jim Miller son excitantes, y yo he peleado con los mejores del mundo en 145 y 155 libras. Miller es uno de esos tipos que lleva mucho tiempo peleando y también tiene un buen resumé. Va a ser tremenda pelea”.

Antes de su slump, Pettis era cotizado como uno de los peleadores más excitantes de UFC por sus golpes aéreos y espectaculares nocauts. Pero la derrota con dos Anjos lo hizo repensar su estrategia de entrenamiento, dedicándose mayormente a mejorar su lucha por los pasados dos años bajo la tutela de Israel ‘Izzy’ Martínez, pero descuidando su mayor fortaleza: su pelea arriba.

“Honestamente me alejé un poco de la lucha para esta pelea. Me enfoqué más en lo que yo soy bueno, que es en golpear, en el striking. Hice muchos guanteos en este campamento y también hice mucho jiu-jitsu. La lucha siempre está ahí. Me puse en la cabeza que tenía que mejorar en esa faceta. Me concentré demasiado en la lucha y dejé a un lado lo mejor que ya hacía”, confesó Pettis (19-6), quien entrena en Milwaukee y es nieto de boricuas por el lado paterno.

“La lucha es una parte esencial de este deporte. Pero la realidad es que yo nunca voy a alcanzar a un tipo como Clay Guida en lucha y él no me va a alcanzar en la fase de pegar. Así que tengo que enfocarme en que mi pelea arriba esté a un alto nivel y no pensar tanto en quién derriba a quién”.

Font en duelo de noqueadores

El cartel de UFC213 tendrá de apertura a otro peleador de sangre boricua cuando Rob Font enfrente al peligroso brasileño Douglas Silva de Andrade por el sistema digital de UFC Fight Pass.

Font (12-2 con cinco nocauts), nacido en Boston y cuyos padres son oriundos de Ponce, figura como el decimoquinto clasificado de las 135 luego de ganar tres de sus cuatro salidas en UFC, incluyendo nocauts sobre George Roop, Joey Gómez y Matt Schnell.

Pero ante Silva de Andrade enfrentará a un recio pegador con marca de 24-1 con 19 nocauts. Claro, 21 de esas peleas fueron en empresas regionales como Jungle Fight y Amazon Fight. En UFC tiene foja de 2-1.

Con un triunfo aquí, quizás, podría enfrentar nuevamente a alguien entre los mejores clasificados, como hizo frente  el cuarto clasificado, John Lineker, en el 2016.

“Mi aspiración es poder pelear con alguien entre los mejores 10 de mi peso o entre los mejores 15. Definitivamente, quiero estar entre los mejores 10”, dijo Font.