Cracovia, Polonia – De Pepino a este país europeo ‘solamente’ hay  5,060 millas de diferencia. Y cuando en Pepino estaba surgiendo la raza criolla, en Polonia había desaparecido hacía mucho tiempo los caballeros mediavales.

Pues a tantas millas de distancia y tal rica cultura llegaron dos hijos de San Sebastián a defender la bandera de su pueblo y de Puerto Rico: el central Mannix Román y el esquina Jackson Rivera, ambos integrantes de la Selección Nacional que el domingo comienza el Mundial de voleibol.

“Para mí es honor representar al barrio en donde nací y en donde me he vivido prácticamente toda mi vida. Y ojalá que sirva de ejemplo para que los jóvenes de barrio sepan que se puede llegar desde los barrios hasta aquí”, dijo Román.

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De 31 años y varios años de experiencia con la Selección, aunque nunca había jugado en un Mundial, Román nació y se crió en el barrio Hoyamala de San Sebastián, que dista del pueblo como a unos 10 minutos de diferencia.

Allí también estudio y allí comenzó a jugar baloncesto hasta que lo descubrió el voleibol y lo invitó al Campeonato Norceca Juvenil del 2002, en el que Román quedó Mejor Bloqueador y del que saltó ese mismo año a debutar con los Caribes de San Sebastián en el voleibol Superior.

Ahora tiene en su resumé un Mundial y una Copa del Mundo (2007), así como otras múltiples competencias menores con la Selección. También tiene experiencia en voleibol de clubes en Asia y juega actualmente para los Indios de Mayagüez en el voleibol Superior.

Román nunca conoció a Rivera de muchacho en San Sebastián. Como dijo, Román no se crió en el voleibol. Rivera sí. Además, Rivera es cuatro años menor que Román y es natural del pueblo. Si tenía contacto con Hoyamala, era muy poco en su adolescencia.

El saltarín Rivera, quien comenzó como acomodador, se crió en el juego viendo a jugadores pepianos como Rafael ‘Peca’ Cortez y Juanmi Méndez  en la liga de Lomas. Dijo que no lo dejaban jugar por menor de edad. Pero fue abriéndose puertas y aquí está, en el nivel mundial.

“Esto es lo que todo atleta quiere: representar a San Sebastián y a Puerto Rico. Es sumamente gratificante”, dijo Rivera, de 27 años.

Rivera llegó a la Selección este mismo año, luego de dos destacadas temporadas con los Mets de Guaynabo en el voleibol Superior que también lo llevaron a jugar a nivel de clubes en Medio Oriente en la temporada 2013.

Actualmente juega para los Patriotas de Lares.

Tanto Román como Rivera lamentan, sin embargo, estar jugando Superior fuera del pueblo. Ambos jugaron en los 2000 con los Caribes  y han cogidos otros rumbos ante los tumbos que ha dado esa franquicia que ha sido ganadora y tradicional en sus mejores años.

Rivera recuerda el campeonato del 1999 ante los Changos de Naranjito en una cancha Pepín Cestero de Bayamón en donde el público daba al techo. De hecho, en ese campeonato participó su compañero en la Selección, Héctor ‘Picky’ Soto.

Naturalmente, Rivera y Román quisieran ver esa celebración nuevamente algún día.

“Hace falta que San Sebastián viva esa experiencia otra vez.  San Sebastián apoya a sus equipos cuando hacen las cosas bien. Sabemos que la fanaticada está ahí y que San Sebastián merece una franquicia sólida”, dijo Rivera.