Los Mets de Guaynabo lograron el miércoles su segundo campeonato corrido en su quinta final consecutiva. 

Ahora suman cuatro cetros en seis finales en las últimas nueve temporadas, y la cosa parece tomar tono  de dinastía. Es imposible no reconocer que que andan por ese exclusivo camino del  deporte.

“No soy quien para decir eso. Eso le toca a los expertos del voli determinar eso. Sí somos un gran equipo y una gran organización. Aparte de ganar campeonatos, se trabaja serio. Hay una estructura”, destacó el Jugador Más Valioso de la serie final, el acomodador Ángel Pérez, poco después de celebrar el campeonato logrado anteanoche con un triunfo en tres sets sobre los Caribes de San Sebastián, que le dio a Guaynabo la serie vía barrida.

Pérez sabe que hablar de dinastías en el  voleibol puertorriqueño es un tema delicado. Dinastía de verdad, sin cuestionamientos, fueron los Changos de Naranjito, quienes suman 24 campeonatos en la Liga de Voleibol Superior Masculino (LVSM) y los cuales una vez fueron a 10 series finales seguidas. 

Dinastía también lo fue la de las hoy extintas Pinkin de Corozal de la Liga del Voleibol Superior Femenino, las cuales entre las décadas del 1970 y 1980 ganaron 15 títulos, nueve de esos de forma consecutiva. Y más recientemente en el denominador pueden ser mencionadas las Criollas de Caguas que en parte de las pasadas dos décadas se han alzado con 10 cetros nacionales.

En ese contexto, entonces, lo que Guaynabo quizás ya tiene montado es una potencia. Pero no se puede dejar de hacer la pregunta si lo logrado ya cualifica para ser visto como una nueva dinastía en la LVSM. 

El programa de voleibol masculino en Guaynabo vive en la actualidad una  segunda etapa en la LVSM, a la que regresó en el 2008. En su primera etapa, en la década de los 70, ganó un título en el 1976.

La pregunta busca la respuesta a  por qué los Mets han sido un equipo  ganador desde que regresaron hace nueve años, y por qué han logrado ganar sus  dos más recientes títulos sin  jugadores refuerzos en temporadas en las que otras organizaciones han usado hasta dos   importados.

En el campeonato logrado el miércoles, de hecho, los Mets eliminaron a un equipo de San Sebastián que tuvo dos refuerzos. Ese dato le agrega valor a la causa pro dinastía que ya se debate en círculos del voleibol.

“Es un valor enorme. Tenemos de lo mejor en Puerto Rico en cada posición, y eso hace que los apoderados crean en pagarle a un nativo en vez de a un refuerzo”, calculó Pérez.

Así como se le reconoce ese logro a Guaynabo, también se destaca que los Mets han ganado sin refuerzos porque tienen a uno de los mejores núcleos de nativos en la LVSM. Y considerando que son bicampeones,  hay que asegurar que tienen el mejor núcleo porque además de Perez cuentan con Sequiel Sánchez, Pablo Guzman y Enrique Escalante entre otros jugadores o exjugadores nacionales. Incluso, este año también tuvo al estelar Héctor ‘Picky’ Soto, quien pertenece a los recesados Capitanes de Arecibo. 

Los Mets también cuentan con jugadores jóvenes en ascenso, como el Mejor Bloqueador y Progreso del Año, el central Ramón Burgos, así como el líbero Arnel Cabrera y el acomodador Randy Ramírez entre otros. Además, son dirigidos por Javier Gaspar, exdirigente de la Selección Nacional Masculina, y tienen bajo reserva al líbero Dennis del Valle, quien jugó en el exterior en esta temporada, pero es reserva de los Mets.

Si Guaynabo logra mantener ese núcleo junto durante varios  años, seguramente  lograría, sin peros, que su organización sea vista como  una dinastía.

“Tenemos un núcleo bien interesante entre jugadores jóvenes y adultos. Hay Guaynabo para unos cuantos años más. Esperamos seguir llegando a las finales y seguir dándole felicidad a Guaynabo”, dijo el apoderado de los bicampeones, Ramón ‘Zurdo’ Rosado.

También es importante un dato administrativo en la causa pro dinastía de los Mets. La calidad del equipo se ha mantenido a lo largo de tres administraciones, comenzando con la del fenecido Jorge de Jesús en el 2008, continuando con la que alternaron Joseph Albino y José Pérez, y la actual que comandan Rosado, Hugo Pérez y Marcelo Gutiérrez.