Ya los jugadores del voleibol demostraron que les importa su juego, su federación y su fanaticada. Ahora, la pregunta es cómo harán valer el cambio que gestaron en la cúpula directiva de la Federación Puertorriqueña de Voleibol (FPV).

En poco más de un mes inicia la temporada 2017 de la Liga de Voleibol Superior Masculino (LVSM), la que será la primera plataforma de cambio para la nueva administración de la FPV.

Primera Hora le preguntó sobre esto a un grupo de jugadores. Varios hablaron de la necesidad de oficializar su gremio de jugadores, así como de atraer de nuevo a la fanaticada a la cancha. Reconocieron que deberán ser desprendidos con sus salarios y que debe haber boletos de entrada más accesibles para la fanaticada.

“Lo que queremos hacer es mejorar el nivel, la exposición, las asistencias en las canchas, y ahora es el momento de unirnos y luchar por lo nuestro, que este deporte que llevamos toda la vida jugando”, dijo el veterano esquina José Rivera. 

“Vamos a tener que ser honestos. Hay algunos jugadores pidiendo mucho dinero y la economía no está como antes. La taquilla la tienen que bajar. Y me encantaría ver el torneo masculino (jugándose) en verano”.

La gerencia de los Changos de Naranjito ya anunció un recorte en el precio de los boletos de entrada. El boleto de adulto será de $2.99 y los de niños menores de 10 años de $2.00.

Se rumora que en la LVSM hay jugadores que cobran hasta $70,000 por temporada.

Mientras, el líbero José Mulero también habló del tema.

“Vamos a seguir jugando voleibol. Nada va a cambiar en la cancha”, dijo Mulero. “Ahora vamos a tener una voz. Es sumamente importante en la Liga porque hay mucho por hacer. Todos hemos llegado a un acuerdo que nueve reservas por equipo es muy alto. Queremos que la gente vaya a los juegos y estamos dispuestos a trabajar en la parte de la promoción. De hecho, ya lo hacemos en las redes sociales”, agregó.

“En mi nombre estoy dispuesto a un recorte de salario. Entiendo que debe haber equipos que disminuyan el sueldo de algunos. Hay unos jugadores que ganan cantidades exorbitantes. Y es esencial que los dueños bajen el precio de las taquillas”, añadió.