La playa Mar Bella de Vega Baja es más que un lugar turístico; allí también comenzó una ejemplar historia de deportiva.

María González y Allanis Navas, ambas de 14 años, se hicieron voleibolistas de playa en Mar Bella hace dos años gracias a un programa gubernamental  que las descubrió como talento.  

Una vez se identificaron  como potencias, se  ‘dieron  en adopción’ a los especialistas en las materia.

Y en cuestión de dos años, González y Navas han ganado como equipo todo lo que han jugado en Puerto Rico, y han lucido en los Estados Unidos a nivel de categorías menores.

Tal ha sido su crecimiento en el voleibol playero,  que este fin de semana competirán en Boquerón ante equipos internacionales de edad adulta.

Esta pareja de chicas parece darle vida a un voleibol playero boricua que parecía estar estancado en los pasados cinco años. 

“Hemos trabajado duro para esto”, dijo Allanis. 

“Pero a la verdad  ha sido una sorpresa,  no esperábamos que esto fuera posible”, agregó María.

Todo comenzó en el colegio Piaget de Vega Baja, en donde ambas estudian y en donde Wilnelia Sánchez,  madre de Navas, es la maestra de educación física. 

Allí, aprendieron la base del voleibol de cancha, que es aplicable a la modalidad playera, y dieron muestra de actitud deportiva.

“Son bien apasionadas, bien coacheables y disciplinadas. Ninguna es la heroína del equipo”, dijo Sánchez.

Pasaron al voleibol playero en Mar Bella, en un proyecto  que es iniciativa de Juan Negrón y Raúl Marrero, y que hoy día es parte del Centro de Formación Deportiva del Departamento de Recreación y Deportes.

Allí, Negrón y Marrero las identificaron y las pusieron  a competir nacionalmente en los Juegos de Puerto Rico, y ganaron  de forma invicta los campeonatos de 15 años en el 2015 y el de 19 años en el 2016.

Habiendo hecho su trabajo  y sin celos profesionales, Negrón y Marrero pasaron las chicas  a los especialistas de la modalidad: al programa de voleibol playero de la Federación Puertorriqueña de Voleibol y sus adiestrador, Alexis Feliciano.

“Desde un principio estamos claros con ellas”, dijo Negrón sobre su labor en Mar Bella, en donde atienda a cerca de 80 niñas y niños anualmente.

Prueba de carácter internacional 

Las jóvenes llegan hoy  a Boquerón para jugar el torneo de adultos con marca de 30-0 este año a nivel nacional, incluyendo un título en las categoría Sub-19 y dos torneos ganados en la categoría adultos.

Además,  fueron a los Estados Unidos en julio, al torneo de High Performace de USA Volleyball, y lograron un cuarto lugar en la categoría Sub-17.

En fin, han llamado la atención del voleibol playero, particularmente en una rama femenina que se ha caído completamente tras  la medalla de bronce panamericana que lograron Yarleen Santiago y Yamileska Yantín en Guadalajata 2011.

Jugarán con adultas, pero no dejan de ser una niñas aún.

“Nuestra meta es ganar, pero también en el camino queremos ganar experiencia para seguir jugando en el futuro”, dijo María.