“¿Qué es un fantasma?”. Esa es la pregunta en el corazón del filme El espinazo del diablo, y una que el director Guillermo del Toro responde de varias maneras a lo largo de su tenebrosa historia de horror gótico que se desarrolla en un orfanato cerca del final de la Guerra Civil Española.

La trama comienza con la llegada de un nuevo niño al orfanato, de nombre Carlos (Fernando Tielve), quien perdió a sus padres en el conflicto bélico. De inmediato conoce a la pareja encargada del lugar –interpretada por Federico Luppi y Marisa Paredes- y a los otros niños que habitan allí, cuyas personalidades creemos conocer pero Del Toro, junto a Antonio Trasshorras y David Muñoz, van alterando en su guión a medida que la película va avanzando.

Ese es parte del encanto de este fascinante largometraje: nada es lo que parece. A simple vista es otra historia de fantasmas, la cual Del Toro dirige con su característico don para lo espeluznante con la ayuda de unos buenos efectos especiales para crear a Santi, el niño espectral que aparece de noche con el deseo de comunicar algo. Resolver el misterio de su muerte es la fuerza motora detrás de El espinazo del diablo, pero los temas que aborda no se limitan a eso. El cineasta está igualmente interesado en explorar los efectos de la guerra, lo que muere y se pierde en ella, y cómo esta influencia las situaciones que se viven dentro del orfanato.

Las actuaciones del joven elenco son sumamente efectivas, en particular la de Tielve e Íñigo Garcés, como Jaime, personaje que parece ser el “bully” del orfanato pero que en realidad es tan inseguro como los demás niños que han perdido algo, y su historia está intrínsecamente ligada con la de Santi. Paredes y Luppi son excelentes en sus respectivas actuaciones como los dos viejos que coquetean con la posibilidad de un romance y que están dispuestos a todo con tal de proteger a los menores.

Si se removiesen los elementos sobrenaturales, El espinazo del diablo sería un buen drama acerca de este periodo de la historia española, pero es precisamente el lado gótico lo que la lleva a otro nivel. No es una película para provocar miedo –aunque tiene la capacidad de hacerlo- sino más bien para confrontarlo, tanto el del otro mundo como el del nuestro, que es aún más aterrador.


Presentación audiovisual

La transferencia en alta definición de El espinazo del diablo no es nada menos que perfecta, el tipo que se usa de referencia cuando se quiere presumir acerca de la capacidad del Blu-ray.  La imagen presentada en su formato original 1.85:1 en resolución 1080p le hace justicia a la fantástica cinematografía de Guillermo Navarro con un increíble nivel de nitidez que resalta cada detalle en pantalla. Los colores están perfectamente saturados al igual que el nivel de contraste. Si solo han visto el filme en DVD, esta nueva edición será una revelación.

El audio es igualmente impresionante. La pista en español DTS-HD Master Audio 5.1 es excelente, contribuyendo notablemente a la ambientación con un efectivo uso de los canales surround que te sumergen aún más en la experiencia mientras el diálogo se aprecia claramente por el canal central.

Extras

Guillermo del Toro ofrece una introducción a la película que a la vez sirve como preámbulo a todos los suplementos que se encuentran en el disco.

Del Toro’s Thumbnails es una funcionalidad que se puede activar mientras se ve la película y que permite al espectador observar los diferentes dibujos que realizó el director junto a las secuencias correspondientes en el filme.

Summoning Spirits es una entrevista a Del Toro en la que el cineasta mexicano detalla la creación de Santi. La entrevista continúa en el segmento Spanish Gothic en la que el director de Hellboy discute el origen del guión y cómo se complementa con el de su obra maestra, El laberinto del fauno.

El historiador Sebastián Faber ofrece una breve introducción a la Guerra Civil Española y cómo esta informa los acontecimientos de El espinazo del diablo.

Designing The Devil’s Backbone es otra nueva entrevista a Del Toro que se centra en el diseño de su largometraje, particularmente la dirección artística, los vestuarios y la creación de los distintos “props”.

Una de las famosas libretas con las que siempre carga Del Toro se incluye aquí en una galería interactiva repleta de varios conceptos que el cineasta tuvo en mente antes y durante la filmación. Algunas de las imágenes contienen la opción de escuchar un comentario de Del Toro.

El disco también incluye cuatro escenas que fueron editadas de la película.

El documental ¿Qué es un fantasma?, dirigido por Javier Soto en el 2004, se enfoca en la producción del filme y contiene varias entrevistas con el talento delante y detrás de la cámara así como material “behind-the-scenes”.

Sketch, Storyboard, Screen es una colección de segmentos en vídeo que permite hacer una comparación de varias escenas entre el diseño original de Del Toro, los storyboards del artista español Carlos Gimenez y lo que terminó en pantalla.

Del toro ofrece una pista de comentario, grabada en el 2004 para el lanzamiento original del DVD, que se puede escuchar mientras se ve la película.

Para terminar, tenemos el tráiler del largometraje y un panfleto ilustrado con un ensayo por el crítico de cine Mark Kermode.


Nota final

La combinación de Del Toro y Criterion debería ser algo de ensueño para cualquier fanático del cine. Del Toro es uno de los pocos directores que le dedica mucha atención al material suplementario que acompaña sus películas en formato casero, y esta es una de las mejores -sino la mejor- que se ha hecho hasta el momento. Con una magnífica calidad de imagen y una robusta cantidad de extras que se desbordan del disco, esta edición de El espinazo del diablo es una compra obligada.