Cuando están juntos hablando de un proyecto común, los actores de la película Colao demuestran que su relación es más que profesional. Entre ellos hay una mezcla de camaradería y respeto que va más allá que cumplir con un mismo compromiso laboral.

 Para Raymond Pozo y Miguel Céspedes, dos de los protagonistas del filme dominicano, la dinámica entre ellos y el resto del elenco es uno de los factores que explica el éxito de esta propuesta que ya se colocó como la más taquillera en República Dominicana.

“Cada uno tiene su particularidad y el éxito coincide cuando todas esas cosas las podemos complementar en una sola respetándonos y admirando cada uno el potencial del otro. Reconocer lo que el otro es y respetarlo”, afirmó Pozo, quien al igual que Céspedes, ya es un rostro conocido para los boricuas. Ambos trabajaron juntos en la exitosa comedia Perico ripiao. 

“Ojalá tú estuvieras en ese grupo para que vieras cómo nos tratamos. Cómo hay esa hermandad, ese cariño. Y yo creo que eso es parte del éxito de la película. El cariño que cada uno de nosotros nos expresamos. El disfrute por este trabajo lo hemos podido transmitir”, compartió Céspedes.

Aparte de ese aspecto humano que, de acuerdo a los actores, contribuye a la creciente acogida de las películas dominicanas, también está el factor práctico. La Ley de Cine de República Dominicana ha incentivado la industria cinematográfica al permitir, entre otras cosas, que empresas privadas puedan invertir en el séptimo arte. 

“Se ha dinamizado la industria y entre 2,000 a 5,000 familias se están beneficiando de las 20 a 25 películas que se hacen cada año”, dijo Frank Perozo, director de Colao.

Según estimaciones de la Dirección General de Cine de República Dominicana, esa industria mueve alrededor de $72.8 millones al año, lo que ya la hace una rentable.

La ópera prima del también actor dominicano se filmó con un presupuesto de apróximadamente $2 millones y a una semana de su estreno en República Dominicana se convirtió en la más taquillera desde 2015.

La premisa

Colao es una trama romántica que combina con comedia la historia de Antonio (Manny Pérez), un caficultor de casi 40 años que decide dejar la vida campesina para buscar el amor en la ciudad de Santo Domingo. Allí lo reciben sus primos Felipe (Miguel Céspedes) y Rafael (Raymond Pozo), quienes lo ayudan a integrarse al estilo de vida citadino mientras intenta conquistar a Laura (Nashla Bogaret), la mujer que lo cautivó. 

El cantante urbano Arcángel tiene una participación en el filme como uno de los amigos del protagonista.

El filme será el de mayor alcance internacional producido en el país hasta la fecha. Se distribuirá en 14 países de Centro y Sudamérica, el Caribe y Estados Unidos. 

“No existe una fórmula cinematográfica. Sí hay elementos que pueden hacer que la audiencia conecte, vaya a ver un proyecto y lo disfrute. Todo inicia con un buen guión. Luego viene la materia prima, que son los actores, y después todo el engranaje”, sostuvo Perozo. 

El director exhortó al gobierno de Puerto Rico a respaldar su industria de cine y lamentó que las películas locales hayan perdido la oportunidad de participar en los premios Oscar en la categoría de filmes extranjeros. 

“Eso para mí es doloroso, porque Puerto Rico es muy rico, muy tradicionalista. Entiendo que su cine debe ser exportable y apreciado”, manifestó. 

Las más taquilleras 

Las películas dominicanas con mayor venta de boletos:

Perico Ripiao (2003) 775,000
Lotoman (2011) 650,000
Sanky Panky (2007) 650,000
Nueba Yol: ¡Por fin llegó Balbuena! (1995) 600,000
Cristiano de la Secreta (2009) 400,000
Un macho de mujer (2006) 375,000
Andrea (2005) 320,000
Feo de día y lindo de noche (2012) 300,000