Varios miembros de la prensa, funcionarios de gobierno y parte del equipo de producción de Por amor en el caserío tuvieron la oportunidad de ver el pasado jueves el primer corte de este largometraje puertorriqueño que llegará a las salas de cine locales el próximo mes de octubre.

Luego de 516 puestas en escena, la obra homónima de Antonio Morales –inspirada en sus vivencias y las de otros vecinos del residencial Luis Lloréns Torres, en San Juan- se convierte en la primera adaptación cinematográfica de una pieza teatral boricua. El propio Morales estuvo presente en la función especial realizada en las oficinas de GFR Media, empresa que respalda el proyecto junto a CineCoop y el Departamento de Vivienda.

“Estoy bien orgulloso de nuestros muchachos, de nuestro esfuerzo. Todo esto tiene una historia inmensa detrás de la historia que ven en la película”, expresó el dramaturgo, de 29 años –quien apenas podía contener la emoción de ver su trabajo en un nuevo medio-, en referencia al largo camino que ha recorrido la obra desde su estreno en las tablas, en el 2001, hasta esta versión para la pantalla grande.

Aunque el corte que se presentó aún requeriría de mucho trabajo de posproducción (mezcla de sonido, acompañamiento musical, corrección de colores y ajustes en la edición), ya era posible apreciar el fruto del esfuerzo del director Luis E. Rodríguez, la productora Socorro Torres y -en especial- los jóvenes actores, muchos de ellos residentes de Lloréns, en donde se desarrolla la trama.

Inspirada en parte en el clásico literario Romeo y Julieta, la historia de Morales se centra en el romance que nace entre una pareja de adolescentes que pertenecen a dos bandos distintos que pelean por el control de los puntos de drogas en el residencial. A tono con la obra de William Shakespeare, el filme balancea el amor y la tragedia hasta llegar a un poderoso y emotivo final en el que la joven Anoushka Medina, como “Cristal”, se destaca dentro del dotado elenco.

“Los héroes de esta película son Antonio y los muchachos. Esta historia hay que dejársela ver al pueblo para que recupere la esperanza. A través del cine se llega y se impacta a la gente”, indicó Javier Vidal, vicepresidente de innovación de GFR Media, tras la presentación del largometraje que, luego de su estreno en las salas de la Isla, será llevado a través de un cine rodante a cerca de 25 comunidades con miras a impactar a unas 18,000 personas con su mensaje.