Cuando siendo Miss Universo Alicia Machado subió de peso, la entrevisté en Nueva York. Había tenido la oportunidad de conocerla en Las Vegas, donde ganó. En Nueva York se notaba que había engordado, pero no las 60 libras que decía Donald Trump. Escondiéndose de la chaperona, me dijo que se sentía deprimida, que no sabía que el trabajo iba a ser difícil, sobre todo el comunicarse en inglés. 

Luego la volví a ver en Miami, donde entregó la corona. La saludé, pero estaba molesta por algo. Había solicitado permiso para entrevistarla, pero la chaperona no entendía español y se molestó cuando comenzamos a hablar y grabar para la antesala de Miss Universe.

En ese momento, Alicia me comentó que eso pasaba a cada rato y que había sido una de las que más dinero le había dejado a la organización. 

La chaperona, cuando escuchó que hablamos en español, le dijo que se tenían que ir y Alicia, casi gritando, me dijo: “Me tratan mal, cuando salga de todo hablaré”. Eso lo grabó el camarógrafo Cesare Bragetti (q.e.p.d.) y lo incluimos en el especial de televisión.

Desde que dejó de ser Miss Universe siempre ha dicho lo que sufrió. Pero esta semana, quien ella menos esperaba -Hillary Clinton- la reivindicó ante más de 80 millones de televidentes durante el debate de los candidatos a la presidencia de los EE.UU.

Entrevisté a Hillary cuando vino para las primarias contra Obama y dije lo valiente, agradable, inteligente y preparada que estaba. No ganó. Parece que le faltaba incluir a una latina como la piedra en el zapato de alguien. Ya veremos qué sucede en las elecciones, pero ni cuando fue Miss Universe, Alicia tuvo tanto respeto y admiración de los latinos, que se han volcado apoyándola.

Mejora Don Quique

Hablé con Zulma Lucca y me comentó que su padre, don Quique Lucca, mejora a pasos agigantados y ellos mismos están sorprendidos. Tras la operación de cadera y salir de intensivo, don Quique fue trasladado al área de rehabilitación y está recibiendo terapia, así que nos alegramos. 

La Sonora tocará en la separación de Richie Rey y Bobby Cruz. Por cierto, una compañera le hizo una entrevista a Bobby Cruz y quedé en shock cuando le dijo que al principio de su carrera, y antes de convertirse al cristianismo, tenía que “arrebatarse” para poder montarse en un avión, pues le tenía terror. Menos mal que ahora no usa sustancias controladas.