Jorge Pabón “El Molusco” no sabe que ha sido peor: si la gran molestia que le ocasionaba la piedra que tenía alojada en la vesícula, o el dolor intenso que ha experimentado en el área del costado luego de ser operado para removerle ese órgano.

“Y te lo juro, te lo juro, te lo juro, que yo no me acuerdo cuándo fue la última vez que me quedé en la cama, acostado, sin hacer absolutamente nada, como me está pasando ahora”, compartió el presentador esta tarde en entrevista con Primera Hora.

Con evidente pesadez en su tono de voz, el animador del espacio radial “El goldo y la pelúa” de La Mega, contó que el pasado viernes arribó al Hospital HIMA de Caguas a las 6:30 de la mañana para la operación de su vesícula, y no fue hasta las 4:00 de la tarde, que abandonó la institución hospitalaria.

“Me la removieron (la vesícula). La operación duró dos horas y media, me entubaron y todo. El doctor se tomó su tiempo para verificar que el resto de los órganos estuviesen bien y para estar seguro los quistes que tengo en el hígado no fueran peligrosos. Gracias a Dios, encontró todo en orden, excepto, por supuesto, la vesícula, que la tenía bien inflamada porque la piedra que tenía ahí, era bien grande”, explicó.

El locutor mencionó que, a pesar que actualmente siente mucho dolor, sí puede caminar, pero trata de no hacerlo mucho.

“Lo que me está dando mucho trabajo es ir al baño a orinar”, mencionó con su acostumbrada transparencia.

Por órdenes médicas, el locutor tendrá que permanecer en reposo por los próximos días. Luego de que asista a una cita que tiene programada a mediados de esta semana, sabrá qué día se reintegrará a La Mega.

“Todavía no sé si regresaré al ‘show’ de radio este jueves, viernes o el lunes de la próxima semana. Mi esposa Claudia me dice que tome la semana”, mencionó.

Molusco dijo que, tras la operación, todavía no ha hablado con su colega radial, Angelique Burgos “La Burbu”. No obstante, esta, en entrevista hoy con Primera Hora, le deseó a su compañero “una pronta recuperación”.

El animador enfatizó que ha tenido a los mejores enfermeros del mundo: sus hijos Ocean y Paula Sofía, y su esposa Clauida.

“Ellos han estado pendiente a mí todo el tiempo. Ocean incluso le pidió hoy a la maestra que me llamaran para ver cómo yo seguía y Paula me trae todo a la cama para que yo no me levante”, compartió.