Loíza - Por mucho tiempo, la actriz Eva Longoria escuchó hablar a su amigo y colega Ricky Martin sobre el Centro Tau que estableció a la entrada del pueblo de Loíza para acoger a niños y jóvenes que crecen en ambientes de alto riesgo.

Ambos creen que la educación es la mejor herramienta para prevenir situaciones de violencia e injusticia social. Bajo esa filosofía han unido esfuerzos para promover y recaudar fondos, en conjunto con Global Gift Foundation, que sostengan sus respectivos proyectos filantrópicos. 

En ese compartir, el astro del pop supo que Longoria visitaría la Isla para apoyar un documental puertorriqueño en favor del voto latino en Estados Unidos y le pareció una buena oportunidad para que conociera por ella misma los esfuerzos humanos y educativos que se realizan en el interior de la moderna estructura, inaugurada el año pasado.

La visita se concretó poco después de las 2:00 p.m. de este miércoles, cuando la famosa artista se trasladó directamente desde el aeropuerto en Carolina y llegó al Centro Tau dispuesta a dar la mano, a hablar, a preguntar todo lo que le inquietó, a repartir sonrisas, a jugar… hasta finalmente quedar sorprendida.

“Increíble”, reaccionó a su experiencia recorriendo los salones de clases y áreas recreativas del centro. “Estoy aquí hoy y me encanta hablar con las maestras, con los estudiantes, con el staff, con el equipo que está haciendo el trabajo, y para mí es muy importante porque la educación es la llave para escapar de la pobreza y en un sitio como Puerto Rico, que hay muchos problemas de la economía y los niños aquí necesitan más ayuda, más apoyo, me siento muy honrada de estar aquí mirando el trabajo de una persona muy especial como Ricky”.

La productora de la serie “Devious Maids” y “Telenovela” llegó con el cabello suelto, pero al poco tiempo lo recogió en una cola de caballo. Lucía sencilla, con chaqueta y camiseta negra, mahón y tenis. Así, cómoda, subió a la biblioteca donde junto con un grupo de estudiantes y directivos de la escuela para una bienvenida que se convirtió en una amena sesión de preguntas y respuestas.

“Esta escuela se basa en dar amor, paz, tranquilidad y, sobre todo, nos da para nosotros ejercer nuestros estudios”, le indicó la joven Freysa Santana antes de que la estrella, de origen mexicano, se emocionara al encontrarse sentada al lado de otra Eva.

Recorre el centro 

“¡Me gusta tu nombre!”, exclamó Longoria en español, idioma que aunque dice no dominarlo, lo entiende y habla bastante bien.

David Rosario le contó que desertó de la escuela a los cinco años y hace ocho meses llegó al centro. “No me gustaba la escuela antes y desde que estoy aquí me preparo solo”.

Longoria le contó a los menores que nació en Texas, que tiene tres hermanas, siendo ella la más pequeña; que en su núcleo familiar abundan las maestras y que el español lo aprendió siendo una adulta.

Asimismo la estrella hollywoodense quiso conocer sobre la cantidad de maestras en el centro (14); el gasto anual de la institución ($1.1 millones); sobre la integración de padres e hijos, y cómo mientras unos estudian, a los otros los cuidan en el área de infantes; y la pregunta que un tanto estremeció a los presentes fue: ¿Cómo está la economía en Puerto Rico?

Bibiana Ferraiouli, directora de comunicaciones de la Fundación Ricky Martin, introdujo entonces al presidente de la Junta de Directores de la fundación, Kurt Schindler, quien además es experto en temas financieros. 

Al escuchar el escenario que se vive hoy día en el país a nivel económico, surgió otra pregunta: ¿Las familias de estos niños van a ser las más afectadas? Las cabezas presentes, cual si fuera una coreografía, asintieron, reconociendo que la población de escasos recursos encara un tiempo difícil.

“¿Vamos a conocer la escuela?”, preguntó luego la invitada especial y así comenzó un recorrido por los dos niveles de la escuela, guiado por Ana Iris Guzmán, presidenta de Nuestra Escuela, organización que dirige la parte académica del Centro Tau, en colaboración con SER de Puerto Rico e Iniciativa Comunitaria.

Longoria entró al primer salón, se sentó en el piso y conversando con el pequeño Edison Villegas y otros niños, ayudó a armar bloques de llamativos colores.

“Nosotros tenemos la misma visión del mundo, que todo el mundo necesita un chance”, expuso luego la artista, quien considera al astro boricua su “marido filantrópico”.

Destacó la importancia de unir esfuerzos con fundaciones como la de Ricky Martin y otras para dar a conocer lo que hace cada una y potenciar sus esfuerzos. En su caso, la Fundación Eva Longoria fortalece la educación entre niñas y mujeres latinas, además de apoyar a los padres para que les ayuden en sus necesidades académicas.

Eduardo Santo Domingo, al igual que muchos de sus compañeros, la saludó y le habló en fluido inglés. Él le enseñó un marco que comenzaban a formar con cartón y piedras, pero realmente su pregunta para la artista era otra: ¿Tú estuviste en la película de “Star Wars”? Un “no” inmediato alejó la ilusión del niño de encontrarse ante uno de sus personajes favoritos.

El recorrido de Longoria terminó con una gran reunión de los estudiantes en el anfiteatro. Desde los más chiquitos hasta los más grandes esperaban por posar cerca de ella, que para ese momento ya se había puesto la camiseta con el logo del Centro Tau que le entregó su tocaya, Eva.

Hubo varias “buyas” de alegría.

“Puerto Rico está lleno de gente que quiere ayudar y llena de gente generosa y cuando tienes una comunidad así, puedes hacer centros como este”, puntualizó.

Longoria permanecerá en la Isla hasta mañana, jueves. Esta noche participará de una actividad privada para recaudar fondos para el documental “Ours Is a Future”, creado por los hermanos puertorriqueños Gianpaolo y Alessandro Pietri en torno a la importancia del voto latino en Estados Unidos.