La pareja compuesta por la cantante Jennifer López y el expelotero Alex Rodríguez sigue expresando al mundo su enchule.

Esta vez fue a través de la publicación de la edición de diciembre de Vanity Fair, donde no solo recordaron cómo se dio la dinámica que los llevó a una primera cita y los atributos que sirvieron para avivar la chispa que los mantiene juntos al día de hoy, sino que también dieron muestra de su química a través de sensuales poses para el fotógrafo Mario Testino.

De hecho, si bien lucen trabajadas con la elegancia que distingue a la Diva del Bronx, lo cierto es que una de ellas ha generado controversia en las redes sociales  por lo que ha sido catalogado por algunos como un alto contenido sexual. Se trata de la foto en la que el expelotero de origen dominicano, sentado en un mostrador de cocina mientras la artista posa entre sus piernas, agarra su falda de modo que deja al descubierto el panty plateado y parte del trasero de su novia.

Durante la entrevista, el exbeibolista de los Yankees de Nueva York comparó que ambos tienen mucho en común, al punto de ser “como gemelos”, teniendo en cuenta el ambiente modesto en la que se criaron, el que a los veintes fue que comenzaron a despuntar en sus propósitos profesionales, y las vicisitudes que han tenido que superar más allá de la fama y el dinero.

“Ambos somos (del signo) leo, los dos somos de Nueva York, los dos somos latinos y como veinte otras cosas”, enumeró Rodríguez.

A esto la madre de Max y Emme, gemelos producto de su pasada relación con el cantante Marc Anthony, añadió que “muchas de las personas que he conocido en mi vida, no valoran lo que hacen y lo grandioso que es… no la grandeza de una casa, sino el momento de poder sentarte con alguien que amas, con una familia, con hijos saludables”.  

La intérprete de “Dance again” y “On The Floor” también repasó cuando se conocieron en el invierno de 2016 en un restaurante de Beverly Hills (California). “Yo casi le grité a Alex, pero soy la persona más tímida cuando se trata de cosas como esas. Pude, literalmente, haberme ido. Pero caminé hacia él y lo toqué en el hombro y le dije ‘Hey’”.

La cantante añadió que “yo recién salía de una promo para mi programa ‘Shades of Blue’ (donde hace el papel de la detective “Harlee Santos”), así que estoy vestida como el personaje, como un chico, mahones, pelo rizado y corto. Él me mira. Yo le digo: ‘Es Jennifer’. Y él dice: ‘Te ves hermosa’”. Horas después, Rodríguez la llamó para proponer su primera cita para cenar en el Hotel Bel Air.

“Él estaba sentado con su camiseta blanca, muy seguro de sí mismo, muy masculino, ¡pero fue muy conversador!”, recordó López. A lo largo de la conversación, habló de por qué se retiró de ser jugador de béisbol, “y sobre cómo se veía a sí mismo casado otra vez, esas cosas de las que normalmente tú no hablas en una primera cita”, además de que a los ojos de la cantante, Rodríguez lucía nervioso.

Por su parte Rodríguez recuerda que "ella me dijo alrededor de la tercera o cuarta ‘entrada’, que estaba soltera”, lo que lo llevó a pensar en que “tenía que levantarme (de la mesa) y volver a ajustar mis pensamientos”.