Aunque para los actores una toma frente al altar es algo usual, para Jorge Alberti no lo es, y más si se trata de una escena de la vida real.

En la noche del viernes, justo después del Día de Navidad, Jorge Alberti y su novia Katia Parrilla se unieron en matrimonio durante una sencilla ceremonia celebrada en el restaurante Antonio's en Condado.

Al rito, oficializado por la jueza Carmecita Burgos Pabón, asistieron unos 100 invitados, entre ellos, la intérprete y actriz Nydia Caro y el cantautor Luis Fonsi junto a su esposa, la actriz Adamari López. La novia es prima hermana del cantante.

Los recién casados expresaron que no hubo nervios durante el importante momento, sino más bien ansiedad.

“Era más el deseo de ver a los invitados, saludarlos y estar bien felices con la gente que queremos”, reveló enseguida la novia.

“Yo estaba tan contenta y emocionada de que todo ya se haya completado. Nuestros sueños se formalizaron, todo está en orden. Es una meta que ya cumplí”, añadió la bailarina y maestra.

Jorge Alberti, quien actualmente aparece en el melodrama “Don amor”, aseguró que a pesar de haber tenido escenas de bodas en varios proyectos dramáticos, lo que ocurrió en la ceremonia no fue planificado.

“No lo ensayé. Fue algo supernatural y bonito porque la familia y las amistades se unen y, dentro de todo, es lo más feliz que nos tiene”, expresó.

El próximo 4 de enero Katia Parrilla se mudará a México junto con su ahora esposo, quien continúa en la grabación de la novela “Vuélveme a querer” de TV Azteca.

Luego, la joven regresará a la Isla para participar en los ensayos para los conciertos de Luis Fonsi en el Coliseo de Puerto Rico. De las tres funciones que tiene el cantautor, Jorge Alberti verá a su esposa bailar en el Día de San Valentín.

La luna de miel tendrá que esperar hasta el verano, lo que no les entristece, según comentaron. Igualmente, los hijos vendrán, pero no por el momento.

De Lusi Fonsi y Adamari López admitieron haber recibido consejos, siendo el que disfruten de este momento el más repetido.

De la fortaleza que ha mostrado la pareja de artistas, Jorge comentó que es “algo admirable cómo Fonsi ha apoyado a Adamari en todo este proceso (su diagnóstico y tratamiento contra el cáncer de seno). Además de que él la ama mucho... Es un privilegio estar con ella. Es una persona que se da a querer demasiado”.

La ceremonia

Jorge Alberti llegó al restaurante temprano, a eso de las 6:40 de la tarde. La novia había arribado antes y, mientras permanecía en un auto, él la vió.

Luego de la entrada de la mayoría de los invitados, Katia llegó al vestíbulo del establecimiento a las 7:25 de la noche y desfiló del brazo de su padre, el doctor Pedro Parrilla.

La novia lució un vestido strapless color hueso, en chifón de seda, con encaje en el área del busto, creación de la modista Eva. Llevó, además, un velo largo y el arreglo estuvo a cargo de Junior Meléndez.

El novio, por su parte, se veía sumamente elegante en etiqueta.

El mensaje de la jueza Carmencita Burgos Pabón durante la ceremonia, a la que no tuvo acceso la prensa, se basó en la vida de matrimonio que les espera de ahora en adelante.

“El amor por sí solo no es suficiente para la felicidad. La madurez de la relación dependerá del desarrollo de la amistad... Construyan su matrimonio con los rasgos más nobles del respeto mutuo”, les dijo la magistrada.

Los anillos fueron cargados por Gustavo y Cristian Parrilla, sobrinos de la novia. Mientras, Desirée Rojas y Karlo Martínez, cuñada y hermano del novio, fungieron como padrinos.

Por momentos se escucharon risas y luego los vítores de los invitados dejaron establecido que había concluido el rito.

La decoración del Salón Condado, según reveló la coordinadora Idalia Canales, contenía hortensias, tulipanes, lirios y orquídeas, en su mayoría de color blanco.

Los invitados degustarían, en la cena, una paella, carnes blancas, pasta y ensalada. Mientras que el bizcocho de tres pisos, confeccionado por Azuarte, era de vainilla y almendras.

Jorge Alberti (31) y Katia Parrilla (29) se conocieron hace tres años cuando participaron en la pieza “La nena tiene tumbao”.