Kany García llegó al punto en su carrera que no canta simplemente por cantar. Lo que se escucha de ella en su nuevo álbum, Soy yo, es un reflejo de su conciencia, de sus emociones, de lo que cree y de lo que defiende.

En el repertorio de 11 temas propios, producido por su director musical Marcos Sánchez y Afo Verde, CEO de Sony Music Latin, no hay un tema improvisado. Todos, siendo muy diversos en sus ritmos y arreglos -hay bossa nova, rap, blues-, marcan la evolución artística de esta puertorriqueña dentro del pop romántico (sin caer en la corriente urbana), e invitan a la mujer a valorarse a sí misma y a pararse en sus tacones para luchar por la equidad de género.

“Hago lo que puedo defender de corazón y lo que siento que mi público va a creérmela”, afirmó la cantautora.

Sácala a bailar y Banana papaya, este último en colaboración con Residente, son los dos temas que abarcan estas realidades que para ella eran necesarias traerlas a este disco que ya le está ampliando los horizontes de su carrera en el resto de Latinoamérica, plazas hispanas en Estados Unidos y Europa.

“Es un disco sumamente positivo, aun cuando tiene canciones de desamor. Es un disco también bien balanceado y en ese balance quería que tuviera más temáticas sociales que en discos pasados”, expuso ayer como parte de la promoción que realiza en la Isla.

La equidad de género es una realidad que le toca directamente como voz femenina de la canción. La desigualdad la experimenta en la radio, en las ceremonias de entregas de premios, donde los tiempos y espacios no son parejos con los hombres.

“Sácala a bailar, que es una canción que no tiene nada que ver con los universos que he mostrado ya, porque nunca había hecho este género (bossa nova), es una canción que quizás no responde a sencillos o emisoras de radio, pero es una canción que toca el tema de la autoestima, porque la única forma de uno lograr empoderarse en la sociedad y exigir por las cosas que merecemos es si tenemos esa seguridad en uno mismo”, apuntó.

De igual forma el vídeo del tema en promoción, Soy yo, es un llamado a las féminas a librarse de los temores y mostrarse tal cual son. Ese reclamo, la artista lo llevó en días recientes a las redes sociales para que otras mujeres se desmaquillen y se dejen ver en su belleza natural, como ella lo hace en el cierre del vídeo.

“Las exigencias que nos ponen son impresionantes, desde el peso que tenemos que tener, cómo tenemos que lucir, si te pones un vestido que ya otra se puso, te van a destruir tu imagen y este movimiento viene de la mano de eso, de como una tiene arrancar de una misma”, subrayó sobre las presiones que enfrentan las mujeres en la industria de la música.

Banana papaya, igual o quizás más contundente en su llamado a la igualdad, es divertido, una sorpresa grata que la músico guardó para el final del repertorio.

Yo lavo los platos mientras tu cocinas/ Aquí nadie tiene la batuta / La banana y la papaya son lo mismo, son frutas / Banana / Papaya / Banana / Papaya / Con diferente talla, botamos lo mismo / Agüita de playa, establece parte de la letra que Kany Residente lograron en dos días de trabajo de estudio.

“Acabamos las estrofas sin tener coro, y él me dice, ‘Qué tal si decimos solo dos palabras, banana y papaya, nos pegamos en el micrófono, y lo vas a decir de la forma más sexy que puedas, y yo te voy a contestar de la manera más agresiva que yo pueda’. Fue super gracioso hacer eso con él, porque los hacíamos los dos pegándonos al micrófono muriéndonos de la risa”, compartió ganadora de premios Latin Grammy y Billboard.

Lo primero que se escuchó de este trabajo -grabado en Puerto Rico- fue Para siempre, letra que seguramente permanecerá en la memoria musical del público por largo tiempo. Es una letra bonita, que recoge muy bien la emoción de quien está enamorado.

Este álbum tiene comprometida la agenda de la artista “como nunca antes”, pero ella, lejos de agobiarse, prefiere disfrutarse el momento.