Los peloteros boricuas han gritado, saltado, arrastrado por el terreno y hasta agitado banderas para hacerle eco al ejército de fieles que ha seguidos sus pasos desde la primera ronda en Jalisco, México.

Por el contrario, las celebraciones del team USA han sido insípidas, carentes de pasión.

“Es una cuestión cultural. No importa cómo está el país, ya sea bien o mal, Puerto Rico siempre sale como uno de los más felices del mundo. Celebramos todo el tiempo”, sostuvo el comediante Raymond Arrieta, quien viajó a Arizona a principios de marzo para compartir con la novena antes del inicio del torneo. 

“Celebramos todo, somos personas alegres que le gusta bailar y la fiesta. Para mí es perfecto porque se vive una vez y hay disfrutar las cosas”.

Arrieta no pudo señalar una razón específica para que los estadounidenses no se vivan los momentos únicos.   

“Quizás es que son muy programados. Nosotros vamos a tener música, corremos por todo el parque y somos muy emotivos. Hasta las palabras las hacemos culturales”, dijo. “Les prestaría dos o tres jugadores, aunque ahora mismo no me da la gana, para que les enseñen”, agregó Arrieta.

El comediante, por otro lado, compartió que durante el mencionado encuentro en Arizona, varios integrantes de la escuadra boricua afirmaron el compromiso de ganar el campeonato en el Clásico Mundial.  

“Ellos lo dijeron. Quieren que Puerto Rico esté feliz, quieren llevarle alegría al pueblo. Quieren ganar y lo hacen por el pueblo”, concluyó.