El comediante Raymond Arrieta completó alrededor de las 7:45 de anoche lo que consideró el tramo “más difícil” de todos los realizados en las pasadas tres ediciones de su caminata.

“Creo que esto ha sido uno de los tramos más difíciles que he hecho en mi vida”, dijo el artista, notablemente cansado a su llegada a la Universidad del Turabo en Gurabo, donde terminó el primero de los seis días de la caminata a beneficio de los pacientes de cáncer del Hospital Oncológico.

“Agradezco a los valientes, a los héroes que nos acompañaron de Cayey hasta acá. Jamás pensé que fuera tan larga y nos fuera a tomar tantas horas llegar”, sostuvo Arrieta después de recibir un donativo por parte de la institución universitaria.

“Al Hospital Oncológico, su dinero va a llegar el martes”, prometió antes de dirigirse a toda prisa hacia el trailer donde pernoctaría para salir hoy en ruta hacia Canóvanas.

Esta edición de Da vida caminando con Raymond arrancó a las 12:34 del mediodía con una participación masiva de personas que desde temprano en la mañana de ayer se reunieron afuera del nuevo estadio Pedro Montañez en Cayey para apoyar al protagonista de esta gesta. Desde allí se realizó la transmisión del programa Día a día de Telemundo con la animación de Alexandra Fuentes y Dagmar.

Raymond se veía nervioso minutos antes de la salida, pero instantes antes de pisar la línea de salida, hizo la señal de la cruz y comenzó a caminar junto a los entrenadores Ruyfe Delgado y Freddie Rodríguez, y el grupo de voluntarios que año tras año vela cada uno de sus pasos.

Una llovizna parecía nublar el inicio, pero poco después el sol se hizo sentir.

Personas de todas las edades, la mayoría caminando, pero otros más atrevidos, como el joven Jonatán Rivera Rodríguez, hizo el recorrido en sancos; Miguel Ventidos, en silla de ruedas y así, otros lo aprovechaban para trotar o correr.

Los padres del animador de televisión, Ramón Arrieta y Carmín Vázquez, lo apoyaban desde un vehículo al frente de la multitud. La progenitora pidió “mucha oración” para su hijo, quien otra vez llevaba en su cuello el rosario que, por tradición, comparten en su familia para sobrellevar cualquier situación.

También recibió la bendición del padre Elías Lorenzo y de la pastora Yolanda Ortiz.

El intérprete de “Plinia” comentó que lo primero que hizo en el día fue darse un buen baño, llamar a la emisora Fidelity, donde también trabaja, y desayunar.


El primer y único oasis en la ruta estaba a ocho millas de la salida, por lo que al llegar a ese punto, ya los dolores se hacían sentir.

“Empezaron los dolores en los talones, abajo del dedo gordo del pie, esa parte siempre duele”, dijo mientras el masajista Armando Negrón hacía lo propio para aliviarlo.

Contó que en el trayecto una señora le gritaba: “¡Ayúdame, ayúdame!”. Luego le confesó que recién había sido diagnosticada con cáncer. “Esa señora nos tocó”, comentó Raymond sobre la emoción que despertó en él.

“He visto gente que me acordaba de la primera caminata”, comentó quien por segunda vez incluye a Cayey entre las rutas. El alcalde de ese pueblo, Rolando Ortiz, le entregó las llaves de la ciudad.

Entre las figuras que se unieron como voluntarios o civiles estuvieron Xioana Nieves; el legislador José Aponte; el ex ejecutivo de Telemundo, Froyd Rivera y su esposa, la modelo Glerysbeth Pagán; el secretario de salud, Lorenzo González junto con su familia, y el periodista Elwood Cruz.

Según los organizadores, la ruta de hoy será subiendo cuestas en su mayoría, lo que la hace quizás más fuerte que la primera.

El oasis estará ubicado en el parque de pelota del barrio Las Piñas, en Juncos, mientras que la llegada será en la Biblioteca de Canóvanas.