Familiares y amigos del comediante y músico Ysrael “Shorty” Castro llegaron este viernes hasta la Funeraria Fernández, en Mayagüez, para despedirse del versátil artista, quien falleció el pasado 22 de enero en Florida, Estados Unidos.

En la amplia sala de la funeraria, descansaba el cuerpo del artista en un féretro que se mantuvo abierto, y que fue decorado con un cartel que mostraba el rostro del también libretista entre la bandera de Puerto Rico y la de Mayagüez, con una frase que leía: “El gigante de la comedia”. Cerca, tres panderos con la monoestrellada hablaban de la pasión del artista por la música.

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“Una de las cosas que él me dijo fue ‘no me le eches pajitas a la leche porque mi nombre es un nombre limpio’”, expresó Montañez Castro, toda vez que resaltó que su abuelo fue una persona dada que “lo que tú le pidieras, te lo daba”.

Al preguntarle qué era lo más que iba a extrañar de su abuelo, destacó con emoción que su presencia en los momentos difíciles, además de “las veces que me decía te amo”. “Voy a extrañar sus besos, sus abrazos, las peleas de él… Voy a extrañar sus regaños, su disciplina, su corrección porque era una persona que le gustaba llevar todo en orden”, agregó el nieto, quien dijo que su abuelo murió tranquilo, en el sueño. 

“Él fue poco a poco descansando hasta que se quedó dormidito y se fue”, comentó. El joven destacó que “Shorty” Castro tuvo dos hijos, su mamá, María Victoria, e Ysrael Vicente, quien falleció. Llegó a conocer a siete nietos y siete bisnietos.

Además de los familiares del comediante, hasta la funeraria llegaron amigos de la infancia del comediante, como Joaquín Granel Rodríguez y Ramón Antonio Vargas, que compartieron algunas anécdotas de infancia que vivieron junto al artista.

“Yo conocí a Shorty en (el barrio) París, cuando jugábamos pelota, trompo… Él siempre orgulloso y contento, tocaba sus instrumentos. Bien charlón que era, bien charlón. Y aunque la gente lo conoce más como comediante era mayormente la música (lo que le gustaba). Lo veías así, chiquitito, bailando y yo lo seguía por todo París”, compartió Ramón Antonio Vargas, quien dijo que “toda la vida” tuvo el mismo sentido del humor.

“Siempre estaba tirando chiste y cosa”, agregó Joaquín Granel Rodríguez. 

“Shorty” Castro fue comediante, compositor, director, locutor, bailarín y libretista. Nació el 28 de enero de 1928 en el barrio La Quinta de Mayagüez, y se crió en el barrio París donde conoció a María Elena Porta, con quien se casó y tuvo a sus dos hijos.  Aunque se destacó como músicos, el artista es recordado por muchos por personajes como “Ramonita sin fuego de la O”, “Camellito”, “Armando Galán y figura” y “Ángelo el angelito”, entre tantos otros.

El pueblo tendrá la oportunidad de decirle adiós al “Gigante de la comedia” este sábado a partir de las 10:00 a.m., en el Palacio de Recreación y Deportes, donde se le hará un homenaje musical con los grupos Alex y sus Pleneros, Barreto y su Plena y la Orquesta de Roberto Ortiz. El sepelio será el domingo, a las 2:00 p.m., en el Cementerio Histórico Municipal.

Su cuerpo fue expuesto en Mayagüez.