Cerca de las 10:00 p.m. arrancó este viernes el “VIAJE” de Ricardo Arjona en el Coliseo de Puerto Rico José Miguel Agrelot de Hato Rey. Con esta presentación, el aclamado vocalista inició su gira de conciertos a través de Estados Unidos.

Montado sobre una peculiar bicicleta, el cantautor guatemalteco interpretó “A la luna en bicicleta” mientras sus seguidores, que no coparon el coliseo, gritaban cautivados por la emoción de ver a su ídolo tras casi dos horas de espera.

Al comienzo del espectáculo, el escenario de dos niveles se transformó en una estación de tren, iluminada por luces blancas y enormes pantallas LED que exhibían imágenes temáticas. El público no recibió de pie a Arjona, aunque se escuchaban gritos ensordecedores.

Ataviado con un mahón desgastado, chaqueta larga negra y sombrero, el artista entonó “El problema”, “Acompáñame a estar solo”, “Dime que no” y “Cuándo” acompañado, precisamente, de una audiencia que lo acompañaba en cada canción. El escenario mostraba  un coro de imágenes y luces que contaban las historias del vocalista.

Y se detuvo el tren.

“Muchas gracias, gracias. Bueno, vamos a ir aclarando las cosas. Sabemos que no ha sido fácil llegar hasta acá, ni para ustedes, ni para nosotros. Por eso, todo lo que queda de mi será para ustedes esta noche”, dijo Arjona sentado sobre una pequeña valija. Y prosiguió coqueto, ya sin chaqueta, a cantar “Sin ti, sin mí” y su éxito “Desnuda”.

Entonces, el coliseo se pintó de azul y los gritos de la gente se calmaron mientras el artista interpretaba con voz clara y potente como trompeta afinada a la perfección sus temas “Invertebrado”, “Piel pecado” y “Cavernícolas”, todos de su nueva producción.

Antes de vocalizar esta última, Arjona bromeó sobre  las parejas y cómo, según él, puede saber cuánto tiempo de relación llevan según la lejanía o cercanía que haya entre ellos al compartir, por ejemplo, sentados en el banco de un parque. 

Más adelante se encendió el auditorio cuando, para su canción “Historia de un taxi”, Arjona entró al escenario a bordo de un auto descapotado. Aprovechando la energía, el artista sacó a pasear su carácter simpático y sensual cuando anunció que buscaba una mujer para compartir la siguiente canción. “Me da con abrazar más de la cuenta y no quiero rechazos”, dijo.

La escogida fue una dama vestida de negro que aseguró tener 43 años. Y así, ocurrió lo anhelado por todas las mujeres que asistieron al coliseo. Solo a una Arjona le cantó “Señora de las cuatro décadas”, la abrazó y la sentó sobre sus piernas en la tarima. La mujer no podía contener la risa nerviosa y, según Arjona, temblaba. Entre el público, las mujeres gritaban “¡Yo me muero!”.

El momento de intimidad y conexión con el público llegó a mitad de concierto cuando el cantautor se sentó sobre la misma valija para escuchar a su público cantar “Te conozco” a capela. Regaló una gran sonrisa mientras asentía con la cabeza.

Arjona interpretó más de veinte canciones, incluidos unos seis temas de su más reciente producción que lanzó el año pasado y su éxito “Asignatura pendiente”. Sobre este tema, Arjona aseguró que solo lo canta en Puerto Rico.

El disco que le dio nombre a la gira internacional, “VIAJE”, es la decimocuarta producción del cantautor de 51 años. Antes de llegar a Puerto Rico, Arjona realizó cinco presentaciones en México, Panamá y Costa Rica. Tras presentar sus dos conciertos en la isla, el intérprete viajará a Chile para participar en el reconocido Festival Viña del Mar el lunes 23 de febrero. Luego, retomará su “tour” que lo llevará a cantar en más de diez ciudades de Estados Unidos.

El vocalista centroamericano recibió ayer un galardón por su trayectoria de excelencia en la ceremonia de Premio Lo Nuestro.