La música es su pasión, pero lo cierto es que el salsero Ismael Miranda ha tenido que reinventarse ante la evolución de los medios sociales como Twitter, donde precisamente sus seguidores le pidieron que grabara el tema Cuando manda el corazón y él los complació.

Como si fuera poco, “el Niño Bonito de la Salsa” regalará esa canción a través de la descarga digital por iTunes a partir de las 8:00 de la mañana de este viernes.

“Este tema lo grabó Vicente Fernández para una (tele)novela y toda la gente que me sigue por Twitter (que son 9,987) en Suramérica me escribieron que cantara el tema, que iba a ser un palo y tomé eso en consideración porque esa es la gente que me sigue y me comprometí a regalar el tema”, comentó con simpatía.

Ese sencillo, por cierto, estará en la próxima producción del vocalista, que aún no tiene título ni fecha de publicación.

En concierto

Ismael Miranda regresa al Centro de Bellas Artes de San Juan para celebrar sus 45 años de peregrinaje musical con el espectáculo Una vida de salsa, cuya producción está a cargo de CEG Events.

Con este show la voz de María Luisa inicia una gira de conciertos por Estados Unidos, Francia, Suecia, Italia, Inglaterra, España, Colombia, Ecuador, México y Venezuela.

Sus invitados confirmados en la Isla son Andy Montañez y José Alberto “el Canario” porque han sido parte de su evolución como salsero. Sin embargo, dejó escapar que pudieran estar en su velada musical también otros colegas como Papo Lucca, Bobby Valentín y Roberto Roena.

En esta ocasión no podrá tener como invitado a Larry Harlow, con quien despuntó exitosamente el género tropical en 1968, porque “hace una semana falleció su esposa y está afectado. Le deseamos lo mejor y a su familia”.

Cheo Feliciano es uno de sus mentores en la música y tampoco podrá acompañarle porque se encontrará fuera del país en la fecha del concierto.

Ismael Miranda se siente afortunado porque en su país las emisoras de radio le tocan sus temas, ya sean seculares o sacros.

En cuanto a las lecciones que ha aprendido a través de su experiencia musical, comentó que fueron buenas y malas.

“A los 17 años me convertí en una estrellita y no supe manejarlo, pero eso me hizo una mejor persona”, luego de seguir por el buen camino tras sus tropiezos con el alcohol y las drogas, acotó.