Hace unos años, las cirugías plásticas dejaron de prohibirse en los certámenes de belleza, por lo que es común que las candidatas de los países participantes se operen busto, nariz, labios, orejas, trasero, e incluso hasta pies, sin los tapujos que vivieron reinas de otras generaciones.

De todos los certámenes, Miss Universe ha sido el más señalado, y en ocasiones controvertible, por lo evidente que han sido las cirugías de algunas candidatas, lo que ha levantado el debate sobre si aquellas que se han operado están haciendo trampas o no.

Pero a diferencia de Miss Universe, Miss Mundo se ha destacado por promover una belleza más natural. Y aunque algunas de las jóvenes que han participado o incluso ganado dicha competencia se han “hecho”, ésta sigue destacando su lema de “Belleza con un propósito”.

Casualmente, las únicas dos puertorriqueñas que han ganado el Miss Mundo, Wilnelia Merced en 1975 y Stephanie del Valle, en 2016, mantuvieron su belleza natural, ya que las dos llegaron a la competencia sin haberse realizado cirugías plásticas.

En 1975, las reinas generalmente competían con su naturalidad y frescura. De modo que con las únicas armas que llegó Wilnelia al certamen fueron su elegante porte, su esbelta figura y sus llamativas piel trigueña y melena azabache.

El 18 de diciembre pasado, 41 años después de la victoria de Wilnelia, Stephanie ganó la corona por su gracia, elegancia y desenvoltura en el escenario.

En un momento en que las cirugías estéticas son la norma del día en celebridades y personas de varias edades, el hecho de que reinas de belleza ganen tal como Dios las trajo al mundo es una verdadera hazaña.

Merced, al centro, fue nuestra primera Miss Mundo.