Manny Manuel tendrá que triplicar el esfuerzo de baile y búsqueda de votos que ha estado haciendo en Mira quién baila. El cantante puertorriqueño volvió a ser amenazado para abandonar la pista después de que la nominación que tuvo la semana pasada quedara anulada como consecuencia de la renuncia de Yolandita Monge a esa competencia de baile de Univisión.

Sin proponérselo, la intérprete de Débil aseguró que su amigo, colega y fanático pudiera someterle al contoneo esta noche y lograra críticas balanceadas del jurado, compuesto por Ninel Conde, Bianca Marroquín y Horacio Villalobos. Aun así, Manny  quedó opacado por la soltura de sus competidores.

Esta es la segunda vez que el merenguero orocoveño se salva sin que sean contabilizados los votos que ha recibido. En la primera contienda, quedó adentro de chiripa porque el pícaro El Dasa sufrió un accidente que lo obligó a decir adiós. Pero en esta tercera nominación será la audiencia quien tendrá la palabra final al escoger a Manny o a la actriz ecuatoriana María Elisa Camargo, la otra amenazada.

El panel de jueces ya hizo su parte. “No me gustó mucho. A estas alturas de la competencia hay que realmente tomar las correcciones que hemos dado y aplicarlas”, sentenció Bianca, la más dulce del jurado, después que “el Rey de Corazones” tradujera a  movimiento corporal el tema Basta ya, en la versión de banda que popularizó  Jenni Rivera. Por cierto, la música de esta gala fue un tributo a esta fallecida diva mexicana y su compatriota Selena.

“¿Tan mal me quedó? Quiero tu punto de vista sincero. Acepto todo tipo de opiniones; para eso estoy aquí, trabajando duro con toda mi alma”, dijo Manny Manuel en su cuenta de Facebook tan pronto acabó la emisión. Los fallos en ese primer número lo condenaron a una segunda ronda con el tango  Tu Vo Fa L’americano, de Al Bano Carrisi. Aunque los aplausos  dieron a entender que lució espectacular en este segundo chance, el jurado lo volvió a nominar junto con María Elisa, a quien irónicamente habían elogiado.

De todos modos, Bianca, Ninel y Horacio fueron enfáticos en que hasta el más mínimo detalle contará de ahora en adelante. Si no fuera por esa alza en sus estándares, Johnny Lozada hubiera salido mejor. Una vez más, el animador de Despierta América prendió fuego en el escenario y cosechó flores en ese panel al ritmo de Ya no, de Selena, en versión de cha cha chá. 

Sin embargo, el ex Menudo también recibió su agüita. “Ocurre que tienes que ir exactamente en tiempo. Había finales de ocho donde quizás temblabas un poquito. Venimos con lupa, a ver todo y hay que rozar la perfección”, le advirtió el severo Horacio.   

Drama y cariño

Ya era raro que en esta cuarta temporada del reality no hubieran traído a los familiares de algún participante. Pues esta noche le tocó a la actriz venezolana Marjorie de Sousa.

Después de impresionar a los jueces con su baile de la balada  Detrás de mi ventana, la madre de Marjorie, María Gloria Rivas, entró al escenario, provocando las lágrimas de su hija.

“Mamá, te dedico esto porque es la primera vez que tengo la oportunidad después de tantos años. Hoy, este día es tuyo. Te amo”, dijo la actriz sollozando al lado de  su hermano Juan Carlos y su progenitora.

“Esta es la importancia del amor de madre”, comentó el animador, Javier Poza,  al señalar que ni la madre de Bianca ni la de Ninel se encuentran con vida, lo que hizo llorar a ambas.

Por otro lado, frases como “¡Puerto Rico más presente que siempre en Mira quién baila!”, en boca de Poza, caracterizaron el programa de anoche.

Este cariño resulta llamativo en el contexto de la imputación de “mal puertorriqueño” que le hicieron la semana pasada Yolandita Monge y su esposo, el comentarista de Wapa  Carlos “Topy” Mamery, al productor de Mira quién baila, Nelson Ruiz.

De hecho, la producción del proyecto anunció la entrega de $5,000 a la Asociación de Leucemia y Linfoma, por la que Yolandita bailaba y para la cual prometió dar un concierto benéfico pronto.