María Elena Salinas, una de las periodistas más respetadas y reconocidas de los medios hispanos en Estados Unidos, asegura que ha llegado la hora de cumplir sus sueños. Por eso anunció que dejará este año Univisión. 

“Ahora me toca a mí practicar lo que predico, hacer las cosas que hace muchos años he soñado hacer”, expresó la presentadora de noticias vespertinas al anunciar que se retirará del canal en diciembre. “Nunca es demasiado tarde”. 

Su salida del canal, uno de las más importantes de la televisión en español, representa el fin de una era de más de tres décadas en la que millones de inmigrantes sintonizaron la pantalla para ver el noticiero que conduce junto a Jorge Ramos. Ambos se convirtieron en una fuente de información noticiosa y de servicio público. 

Salinas, quien nació en Los Ángeles de padres mexicanos, dijo que planea comenzar en enero un nuevo capítulo en su carrera trabajando como periodista y productora independiente. Seguirá también con sus labores filantrópicas. 

“No me han corrido, no he renunciado, no me estoy retirando ni me estoy yendo a otro lado a hacer lo mismo que hago aquí”, expresó la periodista, tras asegurar que “es hora de cambiar el rumbo”. 

El anuncio fue hecho por la misma Salinas en la emisión del noticiero del miércoles por la noche, y por Univision en un comunicado. 

Durante sus más de 36 años de trayectoria, en los que obtuvo numerosos reconocimientos que incluyen un Emmy y un Peabody, Salinas ha reportado las noticias más importantes para la comunidad hispana, convirtiéndose en una de sus voces. 

Nombrada “Voice of Hispanic America” (Voz de Hispanoamérica) por el diario The New York Times, ha entrevistado a todos los pasados presidentes estadounidenses desde Jimmy Carter, así como a los presidentes mexicanos Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo y Vicente Fox; el argentino Carlos Menem; el general chileno Augusto Pinochet; el general panameño Manuel Noriega; los nicaragüenses Daniel Ortega y Violeta Chamorro; y el líder rebelde mexicano subcomandante Marcos, entre otros. 

Siguió también al papa Juan Pablo II en algunos de sus viajes internacionales, cubrió la guerra de Irak, la muerte de la princesa Diana, huracanes en Estados Unidos y Centroamérica, y el terremoto en Haití, entre otras noticias. 

Además de presentar el “Noticiero Univision”, es una de las conductoras de la revista televisiva dominical “Aquí y Ahora”. 

“Estoy agradecida por haber tenido el privilegio de informar y empoderar a la comunidad latina”, expresó Salinas, y aseguró que mientras tenga voz la usará para pronunciarse en favor de los hispanos. 

La periodista dijo en una declaración escrita que se dedicará a nuevos proyectos para dirigirse a una nueva audiencia a través de diversas plataformas, pero no ofreció detalles. 

En una entrevista con AP en 2011, dijo que en medio de sus logros profesionales, su sacrificio personal más difícil ha sido dejar a sus hijas, Julia Alexandra y Gabriela María, durante sus viajes de trabajo. 

Ramos, su compañero en el noticiero, dijo que muy pocos periodistas pueden decir, después de casi 40 años de carrera, que la gente aún les cree. Salinas es una de ellos. 

“Ha hecho historia y ha cambiado muchas vidas. Constantemente repite la frase: Nunca acepto que me digan no. Y su vida refleja precisamente esa filosofía”, expresó el periodista mexicano en una breve declaración enviada a la AP por correo electrónico. “Hemos pasado 30 años juntos haciendo el Noticiero Univision. Por eso, su anuncio significa el fin de una era”, dijo tras señalar que ella siempre pide más periodismo, más investigación y precisión. 

Univision destacó el trabajo de Salinas y dijo que en los próximos meses anunciará el reemplazo de Salinas que acompañará a Ramos en el noticiero, cuya audiencia alcanza a dos millones de televidentes, y a Teresa Rodríguez en “Aquí y Ahora”. 

“María Elena ha tenido un impacto perdurable en nuestro sector y la comunidad hispana, y le deseamos lo mejor”, dijo Randy Falco, presidente y director ejecutivo de Univision Communications Inc, tras describir a la periodista como una fuente “emblemática y fidedigna de noticias imparciales”.