El miedo invade los nervios de Melissa Marty cuando conversa sobre sus planes de mudarse a Los Ángeles para empezar una carrera como animadora o actriz en Hollywood. Se le nota en las bocanadas de aire que toma, los apretones que dan sus puños y los giros de 360 grados que hacen sus pupilas.

Pero una amplia sonrisa y una leve alzada de hombros le devuelven la compostura cuando declara que está segura de que triunfará.

La ganadora puertorriqueña de Nuestra belleza latina 2008 (NBL) contó a Primera Hora que su contrato de tres años con Univisión, televisora que produce esa competencia, terminó en mayo de 2011, momento en el que sintió que su tiempo en Miami, Florida, “había expirado”.

“De repente me sentí haciendo nada y decidí regresar a Puerto Rico en Navidades para reflexionar, encontrarme con esa muchacha emprendedora que dejé cuando participé en Miss Puerto Rico Universe 2008 (Miss Caguas) y luego en NBL, y definir mis metas”, relató la beldad de 27 años de edad sin poder desprenderse del acento neutral –entre mexicano y cubano– que utilizó mientras laboró para esa cadena estadounidense.

La cagüeña nacida en Mayagüez decidió darle el sí a una mudanza a Los Ángeles, California, tras sopesar las oportunidades reales con las que se encontraría para cumplir su sueño de actuar o animar en inglés.

“Estoy llena de miedo, no lo voy a negar, pero eso se me quitará con la fe y el empeño que tengo de triunfar. El 2011 fue un año de redescubrimiento y reorganización. Mi tiempo en Miami ya estaba expirando y, si no surgía nada allí, es porque Dios me tiene algo mejor”, expresó.

¿Se podría decir que te sentiste como una fracasada cuando te quedaste desempleada en Miami?

Para nada. Le exprimí lo más que pude el jugo a esa gran oportunidad que me dio Univisión y gracias a eso y a la preparación que ya yo tenía antes de ganar NBL, sé que no voy a Los Ángeles con las manos vacías; voy a triunfar y voy a mí.

Melissa Marty asegura que su camino hacia el mercado anglosajón está allanado por la experiencia de haber protagonizado dos shows especiales con su nombre en Galavisión, emisora afiliada de Univisión, y haber tenido participaciones destacadas en alfombras rojas de eventos, en NBL y en el programa de farándula El Gordo y la Flaca.

Es consciente, no obstante, de que “hay miles de latinos que han esperado hasta cinco o seis años para salir airosos de una audición en Hollywood”.

“He conversado con (la actriz puertorriqueña) Roselyn Sánchez y ella ha sido muy buena conmigo al darme consejos y ayudarme a establecer contactos. Mariana Vicente (Miss Universe Puerto Rico 2010) y otros boricuas que viven allá también me han ofrecido su apoyo en este paso”, mencionó.

La modelo descartó volver a un reality show porque le interesa proyectar su talento y no su vida personal. Aun así, prefiere dejarle “los pronósticos a Dios”.

En una “mini crisis”

Melissa Marty se niega a revelar el nombre del dueño de su corazón, pero lo describió como “la persona que confía más en una que una misma, y que, sin ser de los medios, ha entendido el trabajo y ha estado ahí siempre”.

La graduada de producción de cine cuenta, sin embargo, que en momentos padece “una mini-crisis” al ver que sus mejores amigas se están casando.

“Es un temor de quedarme sola que de repente me llega, pero se va rápido. Como dice mi abuelita Mami Tita (Sylvia Asencio), a la que amo con todo mi corazón: ‘¡Ya mismito se te quita eso!’”.