Teo Freytes es una persona tranquila, que siempre está haciendo algo. Y es que este artista plástico tiene la virtud de unir dos características que, de primera instancia, parecerían opuestas: la tranquilidad y el dinamismo.

Teo comenzó a trabajar con el medio digital desde hace muchos años, cuando aquí en Puerto Rico, era mínima la cantidad de personas que conocían la Internet. Desde entonces, ha sido propulsor de las exposiciones a través de la red e, incluso, maneja un blog dedicado al arte contemporáneo, http://msa-x.msa-x.org. En el mismo, se exponen diferentes exhibiciones de arte contemporáneo y se reseñan muchas otras. Es, precisamente, el arte contemporáneo uno de los temas más recurrentes de las conversaciones de Teo Freytes.

Durante nuestra entrevista, hablamos un poco de sus proyectos, de las situaciones de la vida, de las polémicas actuales del arte contemporáneo, del país, de cómo hace para lograr crear algo e, incluso, de la loca esperanza que siempre ha puesto en el matrimonio, aun cuando reconoce tener ya demasiadas manías como para volver a casarse.

Abierto y enteramente accesible, sus respuestas no evadieron ninguna pregunta y su mirada se mantuvo atenta y tan seria como su compromiso con el arte.

PRIMERA HORA- ¿Cuál crees que es el papel que cumple un artista en nuestra sociedad?

TEO FREYTES- Definitivamente, es la creatividad, el tú poder crear nuevas opciones y visiones. El artista le da vueltas a las cosas, las cambia, ve opciones en ellas y las lleva más allá.

PH- ¿Cuándo comenzó tu interés por ser artista?

TF- Me di cuenta de que quería ser artista en la escuela superior. Para ese entonces, tomé unas clases de debate porque me interesaba estudiar derecho, pero ahí me di cuenta de que en ese campo utilizas la misma información para crear un pro y un contra, por lo que no había una sola verdad. Esa búsqueda de la verdad me llevó al arte, porque sentía que ahí sí podía expresar una verdad personal y que era sólo una verdad. La obra tiene la capacidad de dejar ver si uno fue sincero o no cuando la hizo.

PH- Dentro de las artes plásticas, ¿qué medios has trabajado?

TF- Yo empecé dibujando y pintando, después hice grabado, serigrafías, escultura en metal y cerámica. Algo que aprendí en la escuela es que uno debe saber lo máximo de todo. Después, cogí la computadora y lo añadí a los medios. Siempre me interesó estudiar cuanta rama había en las artes. Actualmente, estoy trabajando, principalmente con vídeo porque puedo integrar muchos otros medios en él.

PH- Cuando decides crear una obra de arte, ¿de dónde provienen tus ideas?

TF- Soy un artista que crea mucho en depresión y en euforia. Tengo que tener unos extremos anímicos para poder crear. Los estados intermedios no me ayudan mucho. Por ejemplo, si me deja una mujer, puedo crear (risas). Necesito tener emociones altas para poder canalizarlas a través del arte, no como terapia, sino a manera de experimentar con las emociones.

PH- ¿Qué opinión tienes de los artistas contemporáneos y las instituciones que manejan el arte actualmente en la Isla?

TF- Ahora mismo hay algo positivo y es que los artistas han tomado sus propias riendas, precisamente, gracias a la Internet. No necesariamente tienen que depender de las galerías, sino que el mismo artista mercadea su obra y busca participar de ferias y bienales. Las instituciones de arte en la Isla son un poco vagas para mover nuevas tendencias. Por ejemplo, el Museo de Arte Contemporáneo es contemporáneo sólo hasta cierto punto y el Museo de Arte de Puerto Rico no presenta cosas muy avanzadas. Para mí, el artista es lo importante, las instituciones dependen de los artistas, no viceversa.

PH- ¿Qué crees de las ferias de arte?

TF- Son un fenómeno comercial que trae muchas exhibiciones y artistas nuevos, pero ver una obra en una feria no es precisamente un acto placentero.

PH- ¿Crees que las instituciones educativas, como las universidades, juegan un papel importante en el mundo del arte?

TF- Las instituciones educativas no son creadoras de arte, el artista es porque quiere serlo. No necesita estudiar en la universidad, porque a su alrededor hay muchas alternativas y herramientas para poder desarrollarse. La universidad te puede decir cómo usar las cosas, pero no hace artistas.

PH- ¿Hay algún momento en tu carrera que lo recuerdes con mayor apego?

TF- Hace unos años, tuve una galería que aceptaba todo tipo de arte. La idea era que el artista pudiera presentar la obra, sin importar si era algo comercial o no. La idea de la galería, no la mía, era que todo es arte, por lo que se diferenciaba de las galerías convencionales, que a veces te dicen lo que quieren o te censuran. Los seis años que duró fueron fabulosos para mí.

PH- ¿Cambiarías algo de tu carrera?

TF- Me hubiese gustado haber aprendido más sobre la economía del arte. Pero aparte de eso, no cambiaría nada.

PH- ¿Qué es lo más importante en la vida de Teo Freytes?

TF- Mis padres siempre han sido lo más importante. Siempre me dejaron opinar y fueron muy abiertos. Claro, el arte es de lo más importante ahora mismo y dedico mi vida a ello.

PH- Además de las artes, ¿qué otras cosas disfrutas hacer?

TF- Me gusta mucho caminar por Viejo San Juan, ir a las barras y hablar con la gente. Me gusta la gente de pueblo y disfruto mucho la vida que se da aquí en el Viejo San Juan.

Para más detalles sobre la obra de Teo Freytes, puedes entrar a su página blog, http://msa-x.msa-x.org o escribir a teofilofreytes@mac.com. También, el artista participará de la exposición Más sabe el diablo… de la Galería 356 a mediados de este mes de septiembre.