Utilizar los semáforos del país como instrumento para exponer artes multidisciplinarias es el propósito fundamental de la iniciativa denominada Semáforo Tour.

El concepto, que se concentra en el arte del malabarismo, fue creado en el 2005 cuando el líder del grupo La Oveja Negra, Jafet Irizarry, regresó a Puerto Rico luego de estudiar en la Escuela Nacional de Circo de Brasil.

Irizarry, quien precisó que su especialidad en el circo profesional es el equilibrismo sobre cilindros, narró que el Semáforo Tour surgió del arte que se practica en los semáforos de países de Suramérica como Brasil, Argentina y Chile, los cuales tuvo la oportunidad de visitar mientras estudiaba; y algunas áreas de Europa y Estados Unidos.

“Cuando yo voy a Brasil a estudiar, veo que existen los artistas de semáforos y yo por ser extranjero se me complica la vida para trabajar, así que decido usar los malabares para subsistir en lo que hago mis estudios de Circo. Me acostumbré a trabajar en el semáforo, a vivir del semáforo, a ir a la calle, no solo a los semáforos, sino a las plazas, a viajar Suramérica haciendo plazas y semáforos y así hice mis estudios”, indicó.

“Vuelvo a la Isla queriendo construir mi sueño de tener un circo, de querer que exista en Puerto Rico una cultura de circo y realmente necesitaba dinero para hacer esto, así que tomé la misma técnica y empecé a hacer semáforo”, añadió.

El movimiento local está compuesto, además, por otros seis integrantes que se presentan en los semáforos mientras dan rienda suelta a su imaginación. Ellos son Erwin Dedual, Bruno Banki, Marilyn Cortés, Glorimar Sierra, Lizaimi Rivera y Ernesto Suárez.

Estos realizaron el primer tour durante dos semanas en julio de este año con el que recorrieron los municipios de San Juan, Bayamón, Manatí, Arecibo, Hatillo, Isabela, Rincón, Aguadilla, Mayagüez, Yauco, Lares, Ponce, Aibonito, Cidra y Caguas.

“Quisimos, no solamente llevarlo al área metropolitana que es de donde somos la mayoría, quisimos llevarlo alrededor de toda la Isla, así que empezamos a darle la vuelta y nos fuimos al tour. En algunos pueblos utilizamos la plaza para hacer un show donde mezclamos los mejores momentos de nuestros actos”, destacó Irizarry. 

Algunas de las escenas que presentan en sus espectáculos incluyen el malabarismo con bolas, yoyos chinos, aros, cajas, palitos y platos. En las acrobacias practican las aéreas y de suelo y hacen equilibrismo con alambre, rola bola, zancos, monociclo, parada de manos y cuerda floja.

“Veo que hay nuevas personas y nuevos artistas que están comenzando a utilizar el semáforo como un medio para ser quienes son, para ser artistas. Pasar el sombrero parece ser totalmente nuevo en Puerto Rico, realmente no lo es, pero se dejó de practicar por un tiempo y el semáforo trae la necesidad de pasar el sombrero”, abundó el malabarista.

“Un día malo puede haber sido como tener un trabajo de $10 la hora en cualquier empleo por ahí y puedes vivir de eso, un día bueno puede ser de ahí a mucho más. El semáforo nos ha ayudado a nosotros a poder alcanzar otros proyectos más profesionales y de ahí hemos visto que se ha creado una comunidad”, agregó.

Malabar educativo

Uno de esos retos empresariales que mantiene ocupado a Irizarry es la escuela EDUCARE ubicada en Dorado.

“Un proyecto que tengo junto a mi hermana, es un centro para niños con necesidades especiales, escuela de circo. Estamos comenzando, llevamos cuatro años y para comenzar este proyecto de la nada utilizo lo del semáforo como medio para sufragar lo que cuesta tener una empresa nueva en Puerto Rico”, dijo.

Al momento, el colectivo se presenta en distintos festivales y lleva a cabo todos los lunes el “Encuentro de malabares” desde las 5:00 p.m. en el parque Luis Muñoz Rivera de San Juan, al que asisten unos 15 artistas para practicar, compartir ideas y proyectos.

Entretanto, el próximo Semáforo Tour está pautado para julio de 2016.