Los padres que tienen dificultades para mantener a sus hijos apartados de smartphones y tabletas durante las comidas, los deberes escolares y otras actividades pueden hacerse con nuevas aplicaciones para bloquear remotamente el acceso a los dispositivos.

El uso de smartphones y tabletas entre los niños se ha triplicado desde 2011, según Common Sense Media, firma sin ánimo de lucro con sede en San Francisco que estudia los efectos de los medios y la tecnología sobre los más jóvenes.

Una nueva aplicación llamada DinnerTime Parental Control, para dispositivos iPhone o Android, permite a los padres restringir el uso que sus hijos hacen de smartphones y tabletas.

"El precio de smartphones y tabletas ha caído mucho y, como resultado, cada vez hay más niños con sus propios dispositivos", dijo Richard Sah, cofundador de DinnerTime, con sede en San Mateo, California.

Con la aplicación gratuita, los padres pueden hacer una pausa en la actividad del smartphone o tableta Android de su hijo para que se centren en cosas como deberes, ejercicio y tiempo con la familia.

Una vez llevada a cabo la pausa, todas las funciones del aparato se bloquean, incluida la posibilidad de escribir y jugar con aplicaciones. Para usar la app, los padres la instalan en el dispositivo del niño y pueden vincularlo con su propio aparato electrónico.

Los padres pueden establecer tiempos específicos, desde los 30 minutos a las tres horas, cuando el aparato se bloqueará. Luego una cuenta atrás en el dispositivo del niño le muestra cuándo lo puede usar de nuevo.

Sah dijo que para desarrollar la aplicación se inspiró en la tradición de la cena en familia, que cree que se está perdiendo en la era tecnológica. DinnerTime Plus, otra aplicación gratuita de la compañía, permite a los padres gestionar las aplicaciones que sus hijos usan y ver las que utilizan en tiempo real.

Los padres pueden comprar también información detallada que subraya cuánto tiempo pueden pasar los niños con ciertas aplicaciones, y con qué frecuencia las activan.

Con otra aplicación llamada ScreenTime, los padres pueden pulsar un botón en sus teléfonos para bloquear el uso de los dispositivos de sus hijos.

También pueden establecer límites diarios para aplicaciones concretas. La app, para Android, va con una suscripción de 3.99 dólares al mes. Kimberly Young, psicóloga que estudia la adición a Internet, cree que los padres han de controlar el tiempo que sus hijos usan con la tecnología, pero añadió que una aplicación puede no ser la mejor forma de hacerlo.

"No estoy de acuerdo con que una aplicación sea mejor que una buena tutela al viejo estilo en términos de tratar una adición a Internet", dijo Young, que añadió que ha visto a niños de incluso tres años usando el móvil.

"El principal tema es determinar la edad en la que los usan", dijo Young. Sah también se mostró preocupado por el uso de dispositivos por parte de los más pequeños. "La mayoría de los niños pueden usar un smartphone antes de escribir su nombre y atarse los zapatos", dijo.